En este sentido, Romaní ha recordado que a la llegada del Gobierno de Cospedal “la situación de la tesorería era crítica, fruto de la gestión errónea del Ejecutivo anterior”. Así, en el año 2011 había un déficit del 7,8 por ciento y una deuda de 11.000 millones de euros, compuesta por 7.000 millones de deuda con entidades y financieras y otros 4.000 millones que se debían a proveedores privados.
Además, Romaní ha explicado que la situación y el proceso de encontrar financiación eran muy difíciles ya que “la calificación crediticia de Castilla-La Mancha era mala, por debajo del grado de inversión, y por el enorme volumen a financiar”.
No obstante, como ha subrayado el titular de Hacienda, “el Gobierno de Castilla-La Mancha ha demostrado capacidad de gestión y que sabía resolver la situación” y “lo importante es que a partir de ahora la tesorería funcione regularmente”.
Ajuste de las cuentas
Durante la rueda de prensa, el consejero ha detallado que esta situación se ha conseguido remontar a través de dos formas. Por un lado, buscando financiación por medio de los distintos mecanismos puestos en marcha por el Gobierno central y mediante operaciones bilaterales con entidades financieras. Por otro, ajustando las cuentas, para no seguir generando ni un solo euro de agujero en la tesorería.
“Así, hemos conseguido que en los años 2012 y 2013 las cuentas estén perfectamente ajustadas al dinero que hay disponible”. “El Gobierno de Castilla-La Mancha gasta ahora mismo lo que se puede pagar, ni más ni menos”, ha asegurado.
En este sentido, el consejero ha agradecido el apoyo que el Estado ha prestado a las comunidades autónomas a través de los distintos mecanismos de pago, que se habilitaron con la llegada del Gobierno de Rajoy. Romaní ha afirmado que “hemos aprovechado al máximo estas herramientas del Estado y tomado decisiones óptimas de tesorería que han permitido un volumen máximo de pagos”.
Además, el consejero ha resaltado la importancia de que Castilla-La Mancha tenga ahora acceso a los mercados financieros, un logro conseguido en 2012, gracias a la confianza generada por el Gobierno de Cospedal ya que, la autorización de endeudamiento permitió a la Junta firmar préstamos con entidades financieras.
De esta forma, solo en el año 2013, se han firmado nuevas operaciones de financiación por un total de 217 millones, “con las mejores condiciones para Castilla-La Mancha”: 75 millones con La Caixa, 65 millones con Caja Rural Castilla-La Mancha, 48 millones con Globalcaja y 29 millones con Banco CCM.
Por ello, Romaní ha agradecido a estas entidades el apoyo prestado para solucionar el grave problema de morosidad, y también ha valorado el hecho de que el conjunto de entidades financieras nacionales hayan refinanciado los vencimientos de deuda. “Gracias a ello, no ha sido necesario dedicar recursos de la tesorería a amortizar préstamos, y se ha podido dedicar a pagar a proveedores”, ha destacado.
Pago de subvenciones
Así, el consejero ha explicado que uno de los pasos definitivos para terminar con los impagos pendientes ha sido un importante volumen de pagos realizado la última semana de diciembre. Se trata de las subvenciones, para las que el Estado no había puesto en marcha ningún mecanismo que permitiera abonarlas, es decir, que cada comunidad autónoma debía encontrar sus recursos para pagarlas.
Pues bien, Castilla-La Mancha ha conseguido liquidar toda la deuda pendiente de subvenciones, algo de lo que el consejero de Hacienda se ha mostrado especialmente satisfecho porque era la parte donde más difícil resultaba encontrar una solución.
En concreto, se han realizado 3.436 pagos, por 33,4 millones, a empresas y 20.405 pagos, por 72,72 millones, a familias e instituciones sin fines de lucro. En total, se han liquidado 23.841 pagos, por 106,12 millones, en materia de subvenciones.
En esta partida se incluyen toda clase de subvenciones a familias, instituciones, empresas, asociaciones y cooperativas; algunas muy antiguas, incluso del año 2008, que ni siquiera estaban contabilizadas, por conceptos tan variados como ayudas a viudas, a asociaciones de defensa sanitaria y ganadera, a mejoras de estrategia comercial, a acción por el empleo, a familias e instituciones sin ánimo de lucro, ayudas por adquisición de vivienda, ayudas por ahorro por eficiencia energética, etcétera.
Con el pago de las subvenciones pendientes, la deuda con proveedores privados ha quedado finalmente liquidada. El último tramo de los mecanismos de pago se ha anunciado recientemente y se hará efectivo en el mes de febrero. En este tramo, la Junta castellano-manchega ha incluido deuda por unos 700 millones de euros, que están pendientes sólo del pago. Por otra parte, el gasto corriente, en concreto el presupuesto del año 2013, está financiado en su totalidad. De hecho, a día de hoy, el presupuesto está pagado en un 95 por ciento.
En cuanto a acreedores públicos, Romaní ha señalado que este año se han abonado cantidades muy importantes a las entidades locales. De la deuda total con estas entidades, que alcanzaba 320 millones de euros, este ejercicio se han liquidado 250 millones. Sobre el resto se está buscando una solución con el Ministerio de Hacienda y se verá cómo se puede asumir.
Por todo ello, Romaní ha asegurado que “tras asumir toda la deuda con proveedores pendiente, puedo asegurar que el Gobierno de Castilla-La Mancha va a pagar en 2014 según los plazos que marca la Ley de Morosidad”.