Dado que la información que proporciona el Ayuntamiento es fundamental para la auditoría ciudadana de la deuda que estáis llevando a cabo, ¿cómo habéis recibido el anuncio de este nuevo Plan de Mejora de la Transparencia?
En principio, con sorpresa. Desde que salió nuestro primer informe, estamos exigiendo públicamente el derecho que tiene la ciudadanía de estar informada con veracidad acerca del modo en que el Ayuntamiento ha gestionado sus recursos. La pregunta que hacíamos en julio, ¿cómo se pagó el bosque de acero?, sigue sin ser contestada. Para contestarla, como para contestar todas las que hemos hecho sobre el “edificio de los agentes sociales”, sobre las operaciones de crédito del presupuesto de 2009 o sobre el Plan de Ajuste no hace falta ningún Plan de Mejora. Para contestar cómo se han gastado un montón de millones de euros que no se han usado para lo que inicialmente se pidieron, es suficiente la voluntad del Alcalde. Que esto es así lo demuestra el hecho de que cuando en el simulacro de pelea que se lleva con la oposición municipal, al Alcalde le interesa sacar a la luz alguna información importante, lo hace, como lo hizo con las modificaciones del proyecto inicial de las nuevas sedes de los sindicatos que había realizado el PP.
Así pues, no podemos evitar sorprendernos amargamente de que el Ayuntamiento nos responda con que ahora tiene un Plan para mejorar la transparencia. Nosotros le diríamos, muy bien, pero entre que el plan se cumple y no, vayan ustedes informando a la ciudadanía de cómo se pagó el bosque de acero, de qué se hizo con los tres millones que no aparecen del crédito para los nuevos edificios de los agentes sociales, de dónde está el dinero que estaba destinado a construir un nuevo edificio del mercado. Vayan ustedes respondiendo a las exigencias que públicamente les hemos hecho diversos colectivos sobre el modo en que los diferentes créditos están lastrando el presupuesto del Ayuntamiento o sobre el Plan de Ajuste o contesten al correo que No Pagamos envío al Concejal de Hacienda en el que pedíamos detalles sobre las decisiones en los plenos del 27 de septiembre y el 20 de noviembre.
En definitiva, nos tememos que este anuncio no sea otra cosa que una maniobra de distracción para intentar en vano esquivar toda un serie de preguntas concretas que ahora mismo estamos poniendo encima de la mesa y que no admiten dilación. Con Plan de transparencia o sin él, el Ayuntamiento debe responder a lo que se le pregunta.
Según vuestra experiencia, ¿qué pensáis acerca de la política de información que habitualmente desarrolla el Ayuntamiento de Cuenca?
Bueno, como se puede deducir de la respuesta anterior, pensamos que es, sobre todo en las cuestiones clave, nefasta.
En la actualidad, el Ayuntamiento de Cuenca no está cumpliendo ni siquiera con las leyes que regulan el ejercicio del derecho de la ciudadanía para acceder a la información sobre la gestión municipal, no cumple ni su propio Reglamento Orgánico aprobado en 2006, es decir, no está cumpliendo con su obligación de garantizar derechos a la ciudadanía conquense.
Cualquier persona que haya intentando consultar un expediente o un archivo del Ayuntamiento, o bien obtener copias del mismo, puede decir que el simple ejercicio de ese derecho se convierte en una aventura casi imposible.
Si visitamos la página web del Ayuntamiento podemos comprobar otras cuestiones:
Lo que se publica sobre los Plenos y las Juntas de Gobierno, se hace tarde y en muchísimos casos de manera incomprensible para el común de los mortales.
Los expedientes completos, que es obligado según la ley, someterlos al trámite de información pública, no se publican en la página web, si acaso los anuncios y no siempre.
No se publican las resoluciones de la Alcaldía como dice el Reglamento, tampoco las convocatorias de los plenos, con el correspondiente orden del día.
No existe la oficina de atención al ciudadano en el sentido que se establece en el Reglamento Orgánico, a la que se pueda dirigir cualquier persona para ejercer sus derechos en el acceso a la información.
Cuando se solicita algo, el funcionario correspondiente que trabaja en ese servicio o negociado, te dice que hay que solicitarlo y esperar a que el Alcalde o el Concejal correspondiente lo autorice, como si fuera un favor que la autoridad de turno te puede conceder de manera graciable y no el ejercicio de un derecho.
No creemos que hacer de la página web del Ayuntamiento un medio a través del que poder acceder a determinada información, la que dice el propio Reglamento Orgánico y otra que se puede añadir, como todos los contratos que firma el Ayuntamiento para la gestión de los servicios o la ejecución de obras municipales, suponga un coste de 263.000 euros. Hay muchos Ayuntamientos que tienen páginas web con mejor y más información que el Ayuntamiento de Cuenca.
Sobre la gestión económico financiera, se consiguen más datos del Ayuntamiento en páginas web de organismos estatales que en la del propio Ayuntamiento.
¿Creéis que este nuevo proyecto anunciado puede cambiar en algo el acceso a la información por parte de la ciudadanía?
El Pleno del 27 de diciembre de 2012 aprobó por unanimidad crear una comisión técnica para que en el plazo de tres meses pueda elaborar un proyecto de portal de la transparencia. No ha sido en el plazo de tres meses, ha pasado casi un año y ahora dicen en el pleno del 29 de noviembre de 2013, que “toman en consideración”, un trabajo académico particular que ha realizado uno de los componentes de esa comisión técnica creada hace un año y que la aplicación de sus conclusiones llevará otro año.
En este respecto, nos gustaría que la ciudadanía coincidiera con nosotros al menos en tres cosas:
La primera es que, con Plan o sin él, el Ayuntamiento está obligado a responder a los requerimientos de información que se le hacen. Que esa obligación no es un favor que nos otorgan, sino un deber que tienen para con todas las personas que residimos en Cuenca.
La segunda es que, con Plan o sin él, el equipo municipal de gobierno no debe esconder tras una falsa pantalla de dificultades técnicas o económicas algo que es un derecho de la ciudadanía y una obligación de la institución. Que la ciudadanía pueda informarse sin mediaciones acerca de lo que “se cuece” en su Ayuntamiento está por delante de cualquier otra circunstancia y es además sencillo. Por eso, cuando el acceso a la información no se realiza como se debe, no hay que achacarlo a otra cosa que a la (mala) voluntad del político de turno.
La tercera es que, igualmente, la información del Ayuntamiento no es de los políticos ni de los funcionarios, sino del pueblo. Los políticos y funcionarios sólo son gestores de esa información y su control sobre la misma no puede ser usado ni para generar relaciones clientelares o caciquiles ni para la pelea entre partidos. Por eso es necesario que esté a libre disposición de cualquiera.