El Hospital General Universitario de Ciudad Real, centro dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), ha ampliado la cartera de servicios de Neurología con la creación de la Unidad de Ictus.
Se trata de un recurso asistencial que comenzó a gestarse en 2022 y cuya actividad se ha iniciado el pasado mes de abril tras un proceso de adecuación de infraestructuras, diseño de protocolos de atención al paciente y definición de criterios de acompañamiento, entre otras estrategias.
La Unidad de Ictus es un dispositivo de cuidados agudos no intensivos destinado a la atención de pacientes con ictus, donde se ofrece una atención protocolizada al paciente con esta patología.
Está atendida por personal entrenado, cuenta con criterios de ingreso preestablecidos, sistemática diagnóstica y terapéutica precisa, especial atención al tratamiento agudo y a la precoz rehabilitación funcional y social del paciente, además de una eficaz coordinación multidisciplinar.
La Unidad de Ictus de Gerencia de Atención Integrada de Ciudad Real está ubicada en la quinta planta de hospitalización de Neurología del Hospital General Universitario, y cuenta con cuatro puestos de hospitalización dotados de equipos de monitorización multiparamétrica no invasiva de constantes vitales.
Desde el punto de vista de recursos personales, la unidad consta de un equipo de Neurología y de Enfermería especializado en la asistencia a pacientes con patología cerebrovascular.
En los últimos años, las unidades de ictus han demostrado con el máximo nivel de evidencia que mejoran la morbilidad y la mortalidad de los pacientes con ictus tanto isquémico como hemorrágico, siendo la medida individual de mayor impacto en la asistencia al ictus, independientemente incluso de si los pacientes han sido sometidos o no a terapias de revascularización.
El ictus
El ictus se produce por obstrucción o rotura de un vaso sanguíneo cerebral. Afecta a 120.000 personas cada año en España y a 5.200 en Castilla-La Mancha. Es la primera causa de muerte específica en la mujer y la segunda en el varón, además de la primera causa de discapacidad adquirida en el adulto y la segunda causa de demencia.
Se trata de una enfermedad que puede aparecer a cualquier edad y en el 80 por ciento de los casos se puede prevenir controlando factores de riesgo como la hipertensión, diabetes, colesterol elevado, arritmias cardiacas, inactividad física, tabaquismo, drogas o exceso en el consumo de alcohol.
Por eso, detectar cuanto antes los síntomas de ictus es clave, ya que el tratamiento trombolítico intravenoso o la trombectomía mecánica realizados precozmente en un centro especializado pueden evitar o reducir el daño cerebral en el ictus isquémico.
En la actualidad, en Castilla-La Mancha existen siete centros que ofrecen el tratamiento trombolítico intravenoso y, desde 2015, dos nodos donde se lleva a cabo la trombectomía mecánica que son los hospitales de Albacete y Toledo.