Autónomos europeos se darán cita mañana en Toledo para celebrar la V Asamblea General de la SE4DS (Autónomos y Microempresarios por una Europa más Social y Democrática), un colectivo compuesto por asociaciones y agrupaciones de línea social-demócrata que representan y defienden los intereses de este amplio colectivo que, igual que en España, sustentan gran parte de la economía de los diferentes países.
Este encuentro organizado por UPTA (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos) Castila-La Mancha servirá también para constituir SE4DS como asociación, con el objetivo último de convertirse en grupo se presión ante los órganos de gobiernos europeos.
Los asistentes debatirán -y pretenden que salga adelante- un texto dirigido a los países miembros de la organización y al Parlamento Europeo en el que piden la homogeneización de la fiscalidad para los autónomos europeos; la homogeneización de la protección social; la homogeneización de los requisitos para el ejercicio de las profesiones en otros países; la mejora en la movilidad de los autónomos europeos (eliminación de trámites burocráticos); campañas de lucha y erradicación de la economía sumergida; políticas de fomento de la dimensión económica y estructural de las actividades económicas más pequeñas; y la creación de oficinas de asesoramiento y atención a los autónomos y microempresas dirigidas a evitar y solventar los problemas que llevan a estas estructuras económicas a morir de manera precipitada.
César García, secretario general de UPTA CLM, explicaba que en Europa hay más de 33 millones de trabajadores autónomos, de los cuales el 10% son españoles. España es el séptimo país de la UE en porcentaje de autónomos según población activa, superado por Italia, Grecia o Portugal, entre otros.
“Sin embargo, las condiciones de trabajo o las obligaciones tributarias son muy diferentes en cada país, así como también lo es la dimensión, tanto estructural como económica de los autónomos europeos. España es uno de los países europeos con menos autónomos empleadores (60%). Mientras la media de trabajadores de las microempresas europeas es de 8, en España apenas llega a la mitad”.
“Si analizamos las obligaciones tributarias y de cotización de los autónomos en los países europeos nos encontramos con fórmulas diferentes en cada uno de ellos. Si bien es cierto que en algunos países no se paga cuota mensual o se aplica el IVA franquiciado o se cotiza según ingresos brutos de forma anual, también lo es que la presión fiscal final es muy similar en todos ellos, aunque no así la protección social que reciben, siendo el trabajador por cuenta propia español quien sale más beneficiado en una comparativa respecto a sus vecinos”.
En este foro también se hablará de economía sumergida y es que, según un estudio de la Universidad alemana de Tubinga, Grecia es el país con mayor peso de economía sumergida al suponer un 21,5% de su PIB. Le sigue de cerca Italia, donde representa el 19,8% del PIB. España completa el podio, con un peso del 17,2%. Sorprendentemente le sigue Noruega con un 12,2% y Alemania con un 10,4%. Esto se debe, entre otras cosas, a la falta de regulación en el ámbito formativo de muchas profesiones, sobre todo de sectores más tradicionales.
En cuanto a la mortalidad de las empresas, apenas el 38% de las constituidas superan los 5 años de vida en España, siendo la media europea el 42,4%, y superando esta media Portugal, Holanda, Alemania, Francia, Austria y Bélgica.