En Castilla-La Mancha el cultivo del pistacho ha experimentado un incremento exponencial en sus plantaciones. En 2022 este cultivo en Castilla-La Mancha se ha multiplicado por 12 en los últimos años y supera ya las 53.000 hectáreas de las 60.000 totales que se estima que haya en todo el país, número que pronto será superado por el crecimiento continuado que está experimentando.
Doctorado de Pistacho dirigido por la UCLM
El responsable de proyectos de ingeniería de pistacho en Solagro, Javier Martín - empresa especializada en ingeniería agroalimentaria en Castilla-La Mancha con cinco de los principales proyectos en la actualidad que proyectan nuevas plantas de procesado de pistacho-, señala que “aunque se vive un boom del pistacho en Castilla-La Mancha, quizás no se conoce tanto sobre este cultivo como se cree”. Esta ha sido una de las razones para que desde Solagro se hayan comenzado las investigaciones para llevar a cabo un doctorado industrial donde se analicen, también desde la parte académica de la mano de la Universidad de Castilla-La Mancha, todos los procesos de este cultivo hasta llegar al mercado, pionero en Castilla-La Mancha.
Proyectos en marcha por importe de más de 13 millones de euros
En Solagro se encuentran inmersos en proyectos de gran envergadura con diferentes empresas. “Actualmente, estamos trabajando para Pistamancha en Ciudad Real en una gran instalación de procesado del pistacho; donde tienen muy claro que es fundamental fijar el diseño de la instalación y la posterior comercialización del pistacho, en este caso a través del grupo Domopistachio”.
“También, estamos trabajando en proyectos innovadores como por ejemplo en Agroptimum de Villanueva de la Jara (Cuenca), o Nature Pistachio de Corral de Almaguer (Toledo), esta última es una cooperativa que se acaba de formar a finales de 2022 con más de 700 socios y se prevé que sea una planta que aglutinará gran parte de la zona de Corral de Almaguer, una comarca en la que ha habido un boom del injerto de pistacho”. Otros proyectos a destacar pueden ser el de Bodegas El progreso, de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real), para el que se está diseñando la instalación para el procesado del pistacho o la gestión de ayudas para la empresa Manolitos NUTS de la Solana (Ciudad Real), también muy importante.
En total, serán proyectos que sumarán unos 13 millones de euros de inversión, siendo algunas empresas pistacheras al 100%, y otras en las que además de vino y aceite complementan su actividad habitual con este gran producto que tanto dará que hablar en los próximos años.
¿Qué evitar para hacer rentable el cultivo del pistacho?
“Unos de los problemas principales del sector es que la gente está empezando a invertir e incluso a montar sus plantas procesadoras sin los criterios y estándares de calidad necesarios. Es preciso, por tanto, profesionalizar el diseño, agrupar producciones, apostar por la calidad y una industria de alto valor tecnológico para lograr un pistacho de calidad y adaptado al mercado”.
En este sentido, el ingeniero destaca que “para que todo funcione, hay que tener muy claros los procesos y los criterios de calidad que el mercado te está exigiendo, tanto fisicoquímicos como microbiológicos”. “Si tú tienes claro lo que te pide el mercado, vas a saber dimensionar tu instalación”.
Según la experiencia de Javier, en muchas ocasiones los agricultores creen que todas las partidas del pistacho se van a vender a un mismo precio, y esto no es así, “hay que tener muy claro el proceso y las pérdidas que se dan durante todas las etapas. Por ello, para que el pistacho sea rentable y se ajuste a la realidad, hay que tener, además, un asesor de campo experimentado en la materia que te ayude en los diferentes procesos, sobre todo, en el momento óptimo de la recolección para no castigar a las plantaciones, que serán las que te garanticen el éxito en los próximos años”.
¿Cómo llevar a cabo un proyecto viable?
Para saber si un proyecto es viable o no, hay que seguir una serie de pasos. “Lo primero que hacemos es ver qué cantidades estima el cliente procesar, para, posteriormente, fijar qué calidades puede tener. Estas calidades regirán sobre los precios de venta al mercado y cuando diseñamos la instalación será siempre en función de unos estándares de calidad, porque si lo haces al revés y solo te basas en costes de maquinaria de tal forma que tu inversión sea mínima, te vas a equivocar siempre. El proceso de la producción de pistacho óptimo no es barato”. “Sin duda, este es uno de los criterios más importantes para no precipitarse al vacío en el mundo del pistacho”.
Nuevas ayudas para plantas de pistacho
En otras palabras, el equipo de Solagro analiza todo el proyecto desde el inicio (permisos, necesidades de la instalación, diseño del proceso y maquinaria, soluciones de alto valor añadido…) siempre teniendo en cuenta las subvenciones que los inversores pueden solicitar para lograr unos porcentajes de ayuda y puntuación óptimos. En este sentido, Javier Martín adelanta que previsiblemente, en marzo salga la nueva convocatoria del PDR 2023-2027 y “estamos animando a todos nuestros clientes, principalmente cooperativas, a hacer un análisis con tiempo, con el objetivo de realizar una estrategia que garantice el éxito de la inversión”.
Objetivos a medio plazo
“El objetivo de Solagro es ser el punto de partida de cualquier cooperativa o cliente que plantee poner en marcha una nueva planta de pistacho o mejorar la existente. Nuestra experiencia y nuestro recorrido va a ser importante. En Solagro, al igual que hemos hecho en otros sectores alimentarios; aceite, vino y piensos, queremos posicionarnos en el mercado del pistacho, como líderes en innovación y gestión de inversiones, diseñando y dirigiendo de forma integral este tipo de inversiones tan importantes para la región. Estamos luchando por ello, a través de la innovación, el equipo humano, y el valor añadido de la experiencia de estos últimos 10 años donde SOLAGRO ha gestionado más de 80 millones de euros, con un fuerte liderazgo en el tejido cooperativo”.
Javier Martín, concluye que existirán posibles consecuencias, no deseables, en los próximos años si no se organiza y ajusta la producción con la posterior comercialización, fijando los criterios y estándares de calidad que ya se están exigiendo. “De no ser así, en los próximos dos o tres años, podrá haber problemas”.