APREL como una de las organizaciones empresariales que participa en la negociación del convenio colectivo de limpieza de la provincia de Cuenca lamenta que por segunda vez se haya roto la negociación del convenio de limpieza de una forma abrupta con la convocatoria de una huelga.
En este sentido, la Asociación Provincial de Empresas de Limpieza junto a las otras dos asociaciones del sector, ASPEL y APEL, señalan que nunca se han levantado de las negociaciones, que han vuelto a sentarse tras la primera ruptura presentando unas nuevas condiciones para llegar a acuerdo, pero que ni siquiera se llegaron a valorar por los sindicatos (CCOO y UGT), estableciendo medidas de presión que han desembocado en una convocatoria de huelga.
Desde APREL denuncian que la representación de los trabajadores ha establecido una estrategia común a nivel regional para presionar a la parte empresarial, sin tener en cuenta que igual que es importante el poder adquisitivo de los trabajadores también lo es la viabilidad de las empresas que también sufren las duras consecuencias de la inflación.
La organización empresarial integrada en CEOE CEPYME Cuenca, recuerda que no se trata de un convenio de empresa, sino de un convenio colectivo de ámbito provincial, afectando a todos los trabajadores del sector en la provincia de Cuenca, por tanto, es necesario aclarar que no se trata de un conflicto que afecte a ninguna empresa en particular sino más bien afecta a todas las empresas del sector de la limpieza de edificios y locales de la provincia.
Denuncias falsas
Por otro lado, la Asociación Provincial de Empresas de Limpieza de la provincia de Cuenca indica que las denuncias sobre retirada de derechos que indican los sindicatos no se corresponden con las cuestiones negociadas en las reuniones mantenidas a lo largo de 2022. Además, esta organización empresarial en ningún momento ha tratado de negociar derechos reconocidos en las leyes que deben respetarse en todo caso.
En este caso se están presentando aspectos particulares de la negociación como cerrados cuando ni siquiera se han llegado a plantear más que a través de unos escritos de máximos de ambas partes que se plantearon inicialmente, y que, una vez echó a andar la negociación, con al menos siete reuniones, se han centrado en la negociación de incrementos salariales y reducción de jornada, aparcando otros temas puestos sobre la mesa en las primeras reuniones.
En concreto, APREL indica en la negociación del convenio las últimas propuestas de incrementos salariales se corresponden con las que se han acordado en otros convenios colectivos provinciales como puede ser el de Barcelona.