www.cuencanews.es
Museo de Arte Abstracto Español
Ampliar
Museo de Arte Abstracto Español (Foto: Dolores Iglesias)

La Fundación Juan March organiza una exposición itinerante del Museo de Arte Abstracto en Europa y EE. UU.

Por Redacción
x
localcuencanewses/5/5/16
viernes 27 de mayo de 2022, 00:52h

google+

Comentar

Imprimir

Enviar

El Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, cuyo titular es desde 1981 la Fundación Juan March, comenzará el próximo 9 de junio en Granada la gira de una selección de más de 40 de sus obras por cinco sedes distintas en Europa y América, en un viaje que durará hasta principios de 2024. La exposición “El pequeño museo más bello del mundo”. Cuenca, 1966: una casa para el arte abstracto –el título en su primera sede– dará a conocer la historia del museo y el significado del arte abstracto hecho en España en el contexto internacional. La ocasión de la itinerancia es el cierre parcial del museo de las Casas Colgadas de Cuenca con motivo de las obras de climatización de sus salas, que dotarán al edificio medieval de unas condiciones de conservación idóneas para un museo del siglo XXI.

La exposición no solo presenta un conjunto excepcional de pintura y escultura, sino que también cuenta la historia de un momento fascinante de la historia cultural española, en el que la fe pionera de Fernando Zóbel en los artistas abstractos se materializó, en 1966, en un espacio insólito que pronto tuvo un gran eco internacional y suscitó elogios como el de Alfred H. Barr, primer director del MoMa de Nueva York, con la frase que da título a la exposición.

El joven museo, nacido de la iniciativa personal de un artista –un verdadero “artist-run space”, como los que empezarían a existir por todo el mundo a partir de la década siguiente– creó un espacio de libertad independiente del régimen político, reafirmó a toda una generación de pintores y escultores, preparó a las más jóvenes y produjo todo un público nuevo en un país que no contaría con museos de arte contemporáneo hasta después de la transición democrática, más de veinte años después de aquella aventura única y original.

Mas de 40 obras y cinco sedes

Para esta exposición itinerante, un equipo curatorial del museo, en el que participan todas las instituciones y el Departamento de Arte de la Fundación Juan March, dirigido por Manuel Fontán del Junco, ha hecho una selección muy significativa de obras de la colección del museo. Algo más de cuarenta obras que no solo resumen la abstracción de la segunda mitad del siglo XX en España, sino que reflejan un momento clave en la historia del arte en España. Entre ellas se encuentran algunas de las obras más definitivas de la generación de pintores abstractos que dominó la segunda mitad del siglo XX, como Elena Asins, Sara Grilo, José Guerrero, Eva Lootz, Manuel Millares, Pablo Palazuelo, Antonio Saura, Soledad Sevilla, Antonio Tàpies, Jordi Teixidor, Gustavo Torner, Fernando Zóbel y José María Yturralde, entre otros, o escultores como Jorge Oteiza, Eduardo Chillida y Martín Chirino. Completa la exposición una selección de obra gráfica, libros de artista, fotografías y documentación perteneciente a la Biblioteca y Centro de Apoyo a la Investigación y el Archivo de Artistas Abstractos en España de la Fundación Juan March. En total, 80 artistas están representados en la muestra.

En cada sede de las cinco que configuran la itinerancia la muestra adquiere caracteres específicos según las particularidades de cada institución, el contexto y el público al que va dirigida. Además de las actividades propias de cada sede, acompaña a la exposición itinerante una publicación con ediciones en español, catalán, inglés y alemán, ampliamente documentada y con textos de María Dolores Jiménez-Blanco (sobre la abstracción informalista española y sus contextos), Ramón González Férriz (sobre el mundo antes y después de 1966), Santos Juliá (sobre la España de 1966) y María Bolaños (sobre los inicios del museo), entre otros.

La primera sede será el Centro José Guerrero de la Diputación de Granada, donde permanecerá del 9 de junio al 4 de septiembre de 2022, en un edificio con ciertas similitudes con los espacios del museo conquense que alberga habitualmente la obra de José Guerrero, uno de los artistas atraído en su momento por el imán del museo, y amigo de Fernando Zóbel.

La Fundació Catalunya La Pedrera presentará en Barcelona, bajo el título Los caminos de la abstracción, 1957-1978. Diálogos con el Museo de Arte Abstracto Español, una ambiciosa ampliación del proyecto, en la que la obra de los artistas abstractos españoles del museo entrará en diálogo con algunos de los máximos representantes de la abstracción internacional, como Mark Rothko, Alberto Burri, Willem De Kooning, Hans Hartung, Jean Dubuffet, Helen Frankenthaler o Jackson Pollock. La exposición, que podrá verse del 29 de septiembre de 2002 al 15 de enero de 2023 en La Pedrera, reflejará las distintas formas que adoptó la abstracción durante la segunda mitad del siglo XX: la abstracción lírica y gestual, el expresionismo abstracto, la abstracción geométrica o la pintura de campos de color. En paralelo, la Fundació Suñol exhibirá obras de Elena Asins, Pablo Palazuelo y Fernando Zóbel junto a obras de artistas de su colección, Susana Solano y Josep Guinovart, invitando también a una selección de artistas para dialogar directamente con ellas y con la biblioteca, la colección y los espacios del Museo de Arte Abstracto Español. Los artistas actuales son Asunción Molinos, Joana Moll, Antònia del Río, Arnau Sala, Julia Spínola, Pep Vidal y Oriol Vilanova, en un proyecto comisariado por Glòria Picazo.

Del 26 de febrero al 18 de junio de 2023 la exposición viajará al Meadows Museum SMU de Dallas, Texas (EE. UU.), que alberga una de las colecciones más importantes de arte español fuera de nuestras fronteras, tanto por extensión como por calidad. El museo se inauguró en 1965 gracias a la donación de la colección de arte español de Algur Hurtle Medows (1899-1978), un empresario del petróleo que fundó la General American Oil Company. Este museo presentará la exposición con título, publicación y comisariado propios, adaptando el concepto general al público norteamericano.

La itinerancia se cierra en Coblenza, Alemania, de septiembre de 2023 a enero de 2024 en el Ludwig Museum Koblenz. Se trata de una sede del Museo-Colección Ludwig, uno de los más importantes de Alemania y fundado en 1976 como resultado de la donación a la ciudad de Colonia de parte de la colección del matrimonio formado por Peter e Irene Ludwig. La sede de Koblenz se abrió en septiembre de 1992 y aloja una colección de arte alemán y francés posterior a 1945.

Situar en el siglo XXI un museo de arte abstracto que vive en un edificio medieval

La climatización del Museo de Abstracto de Cuenca fue presentada el pasado 6 de mayo en rueda de prensa por Javier Gomá, director de la Fundación Juan March –titular del museo–, Darío Dolz, alcalde de Cuenca –titular del edificio– y Manuel Fontán del Junco, director de Museos y Exposiciones de la Fundación Juan March y del Museo de Arte Abstracto Español.

En otoño de 2016 la Fundación Juan March –titular del museo desde que su creador, Fernando Zóbel, se lo donara en 1981– celebró el cincuentenario del museo finalizando la primera fase de una ambiciosa reforma cuyo objetivo fue ampliar el museo con una sala más y devolver a algunos de los espacios más emblemáticos del museo su uso público y su función originaria. Se trataba de potenciar lo que Alfred H. Barr, fundador y primer director del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA), definió como “una de las más admirables obras de arte: un equilibrio notable entre pintura, escultura y arquitectura”.

En esta reforma se amplió el espacio expositivo con una sala del Mesón de las Casas Colgadas, que fue cedida por el Ayuntamiento de Cuenca, y mejoró la morfología interior y las conexiones existentes entre las distintas plantas y edificios para facilitar en lo posible la accesibilidad de los itinerarios del museo; los espacios con restos históricos se climatizaron y reabrieron al público con condiciones de temperatura y humedad relativas ideales para la exhibición de las obras; además, parte del espacio habitualmente dedicado a exposiciones temporales se convirtió en un espacio multiusos, que sirve de auditorio para presentaciones públicas, seminarios y talleres y cumple funciones de biblioteca, archivo y centro de documentación. También se renovó la tienda y se creó un nuevo taller para el programa educativo, por el que pasan más de seis mil escolares al año.

Una vez finalizada esa primera fase de la reforma –y para terminar de dotar al museo de las condiciones ideales para la conservación de las obras y situarlo en el siglo XXI– quedaba pendiente la climatización del resto de los espacios del museo, proyecto que iba a iniciarse en 2020, pero tuvo que interrumpirse a causa de la pandemia. A la voluntad de la Fundación Juan March de emprender la obra de climatización ha querido unirse desde 2019 el gobierno municipal de la ciudad; finalmente, la climatización se realizará a partir del mes de junio de 2022, con un proyecto que durará entre 6 y 8 meses y valorado en unos 500.000 euros, cantidad que será aportada entre el Consorcio Ciudad de Cuenca –del que forma parte el Ayuntamiento, propietario del edificio, junto a la Diputación, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y el Gobierno de España– y la Fundación Juan March, titular del museo.

El proyecto, a cargo de Juan Pablo Rodríguez Frade –autor, entre otras, de la remodelación completa del Museo Arqueológico Nacional en Madrid– consiste en la instalación de una moderna y discreta climatización que, además de permitir la conservación de las obras de la colección en sus salas siguiendo los estándares habituales en los museos, mejorará sustancialmente la experiencia del visitante, que estará menos expuesto, una vez terminada la reforma, a las temperaturas extremas habituales en la ciudad de Cuenca en verano e invierno.

Durante la obra, la Fundación Juan March ha previsto solo el cierre parcial del museo, mientras la intervención lo permita. Permanecerán abiertas, hasta nuevo aviso, las salas de los artesonados (salas A-D), la sala Z y la última sala, habitualmente dedicada a exposiciones y ya climatizada en 2016, espacios que serán ocupados por exposiciones y por una selección de las obras de la colección que permanecerán en el museo, lo que permitirá atender mientras sea posible al público y al programa educativo del museo. El resto se trasladará temporalmente a la sede de la Fundación Juan March en Madrid y al Museu Fundación Juan March de Palma. Una vez terminada la obra, las salas recién climatizadas volverán a acoger las obras de la colección que no formen parte de la exposición itinerante y las exposiciones programadas para 2023.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (1)    No(0)

+
0 comentarios