El periodista y sacerdote Antonio Pelayo ha exhortado a los conquenses que no se dejen arrebatar “el tesoro” de la Semana Santa, al tiempo que ha pedido que se salve del “escaparate de vanidades” de la sociedad durante su pregón con el que ha arrancado este viernes la Semana de Pasión de Cuenca, declarada de interés turístico internacional.
“No os dejéis arrebatar el tesoro de vuestra Semana Santa. Que nadie se atreva a manipularos. Que nadie caiga en la tentación de convertirla en una mera atracción turística”, ha agregado Pelayo al final de su intervención en el Teatro Auditorio de Cuenca, lleno para la ocasión tras dos años de suspensión por la pandemia.
Y ha proseguido: “Salvadla del escaparate de vanidades y superficialidades que caracteriza a nuestra sociedad”.
Según Pelayo, “es un tesoro que está en vuestras manos”, y es “una herencia preciosa de vuestros antepasados que tenéis que transmitir íntegra y sin fisuras a las generaciones venideras”, ha concluido Pelayo, quien ha pedido a los conquenses que le consideren un “hijo adoptivo de Cuenca”, y ellos lo han recibido en un largo aplauso final.
La locución de Pelayo, el décimo sacerdote en pregonar la Semana Santa, se ha caracterizado por muchas referencias cristianas y algunos mensajes del papa Francisco, como los referidos a la pandemia: “o se sale juntos, o no se sale”, y sobre la guerra rusa en Ucrania.
Asimismo, el corresponsal de Antena 3 en Roma y Vaticano ha recordado la “consternación” que supuso la suspensión de los desfiles en 2020 y el hecho de que Cuenca se viera privada de su Semana Santa, lo que significa un “amargo recuerdo del pasado”.
En este sentido, no se ha olvidado de Gonzalo Pelayo, familiar suyo, y director durante años de la Semana de Cine de Cuenca, fallecido en marzo de 2020 por coronavirus.
Pelayo ha calificado de “mágica” y “excepcional” la ciudad de Cuenca, que este vallisoletano visitó por primera vez en los 60 del siglo pasado cuando participó en alguno de los conciertos de la Semana de Música Religiosa, el cuarto festival de música más antiguo de España.
También ha recordado al cardenal Carlos Amigo y a la periodista conquense Pilar Ruipérez (presente en el auditorio), quienes también pregonaron la Semana Santa de Cuenca, ciudad en la que “más del 50 por ciento de los conquenses” pertenece a alguna hermandad.
El acto ha comenzado poco después de las 20.00 horas con un repertorio musical del Coro del Conservatorio de Cuenca, fundado en 1980, que ha interpretado, entre otras cosas, el primer “miserere” tras la pandemia y, con todo el Auditorio “José Luis Perales” en pie, ha servido para recordar a los nazarenos fallecidos.
Después, marchas procesionales con la Banda Municipal de Música de Cuenca, que debería haber celebrado su 125 aniversario durante la pandemia.
En el escenario, el cartel de la Semana de Pasión de Enrique Martínez Gil, velas, un olivo, y el guión de la Junta de Cofradías, con un crespón negro en recuerdo a los nazarenos fallecidos.
Al acto han asistido, entre otros, el obispo de Cuenca, José María Yanguas, el alcalde de la capital, Darío Dolz, concejales de toda la Corporación de la capital, junto al presidente de la Junta de Cofradías de la Semana Santa, Jorge Sánchez Albendea.
Al finalizar el acto, los representantes de las hermandades y los protagonistas de esta edición se han fotografiado en el escenario, donde había un Calvario al que Pelayo ha ofrecido su pregón.