El Polideportivo El Sargal de Cuenca acogía el segundo y decisivo encuentro del Torneo Internacional de España 2022 entre España y Polonia (26:25) en el que era el último test para los de Jordi Ribera antes de poner rumbo a Bratislava y afrontar la defensa de la corona continental.
No era un reto fácil para los Hispanos, que se vieron superados en el comienzo de partido con dos tempraneros goles de los polacos. La inferioridad numérica por exclusión de Ángel Fernández no fue impedimento para que Gedeón Guardiola abriera la lata de los locales, sujetados por Gonzalo Pérez de Vargas en portería y liderados por un Aleix Gómez letal desde el extremo.
Hubo que esperar al minuto 8 de juego para ver a España por encima del marcador. Lo logró gracias a un doblete de Jorge Maqueda, que quitó las telarañas de la portería polaca con dos magníficos lanzamientos exteriores. El ‘5’ de los Hispanos no solo destacó en labores ofensivas, sino también defensivas, exhibiendo un gran nivel en el eje de la defensa junto al capitán, Gedeón Guardiola.
Esta consistencia defensiva se tradujo en un colchón de hasta seis goles, con un inspirado Ángel Fernández al contraataque y un Ian Tarrafeta que también se sumaba al festín goleador de los españoles en la primera mitad. Ni el tiempo muerto solicitado por el técnico polaco impidió que España siguiera siendo dueña y señora del partido, logrando un parcial favorable de 7-1 y ‘secando’ al rival en ataque durante más de 10 minutos.
Polonia tuvo que recurrir a los siete metros para volver a perforar la portería defendida, en este caso, por un Rodrigo Corrales que disputaba sus primeros minutos en el TIE. La superioridad numérica hizo que el equipo de Patryk Rombel volviera a meterse en el encuentro, a pesar del acierto de Ángel Fernández y el tanto de Figueras que permitió mantener una cómoda distancia en el marcador.
Los colegiados del encuentro recurrieron al novedoso ‘Video Proof System’ para señalar la exclusión de Ariel Pietrasik. Agustín Casado, primero en calidad de asistente y después en calidad de goleador, se encargó de sacar partido de la superioridad numérica, aunque nada pudo hacer Pérez de Vargas ante el misil lanzado por Michal Olejniczak. Al filo del descanso, Arkadiusz Moryto fue el encargado de anotar el lanzamiento de siete metros que redujo la diferencia a tres goles (15:12), dejando todo por decidir en la segunda mitad.
En la reanudación del choque, los Hispanos aguantaron el vendaval polaco y, superado el minuto 35 de juego, lograron ampliar la diferencia a seis goles con Peciña y Tarrafeta superando a Adam Morawski. No lo logró Aleix desde los siete metros, tras una gran intervención del meta, a la que respondió Rodrigo Corrales, ganando peso y protagonismo con el paso de los minutos.
De nuevo Jorge Maqueda se erigió como una figura clave para el combinado español, empleándose en defensa y marcando hasta dos tantos a puerta vacía que devolvían la tranquilidad a los de Jordi Ribera. España se volvía a poner a cinco de ventaja gracias a otro gol de Gedeón Guardiola y, de nuevo, a Rodrigo Corrales, que sacó un pie prodigioso para evitar el gol rival desde los siete metros. El buen desempeño del guardameta español bajo palos no fue suficiente para que Polonia fuera, poco a poco, recortando la diferencia en el marcador a partir del 40’ de partido. Los errores en ataque y la inferioridad numérica castigaron al conjunto español, que llegó a ver reducida su renta hasta solo dos goles.
El tiempo muerto solicitado por Jordi Ribera demostraba la necesidad de parar el buen ritmo que estaba imprimiendo al juego el rival, con Gedeón Guardiola apelando al “hay que saber sufrir” en la piña formada por el equipo español. Tres nuevos tantos de Jorge Maqueda y la importante aparición en el extremo de Ferran Solé devolvieron la tranquilidad a las filas locales antes de un final de partido que iba a ser de infarto.
El videarbitraje concedió un ajustado tanto de Michal Olejniczak, que volvía a poner a los suyos a solo dos goles de disputar a España el trofeo de campeón del TIE. Tras el gol de Figueras en forma de respuesta inmediata y la reanudación del partido después de un nuevo tiempo muerto de Jordi Ribera, el partido se volvió loco, manteniendo el suspense hasta el último segundo.
Adam Morawski paró un mano a mano a Ariño y Antonio García estrelló el que hubiera sido el gol de la sentencia en la misma cruceta. La distancia se redujo a un gol con el lanzamiento de Przemyså Aw Krajewski desde los siete metros, que dio esperanzas a Polonia. Aún había tiempo para una más, pero fue Rodrigo Corrales el encargado de sentenciar el choque, con un paradón a Piotr Chrapkowski sobre la mismísima bocina.
La intervención del guardameta español sirvió para mantener el 26:25 en el luminoso y, por tanto, proclamar a España campeona del Torneo Internacional 2022, en el que era el último encuentro antes de afrontar un ilusionante y nuevo camino hacia el Campeonato de Europa de Hungría y Eslovaquia.
Fotos: RFEBM / J.L. Recio
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