Siempre que se realiza un viaje es importante realizar un buen trabajo de documentación de los lugares de interés, y, sobre todo, una buena planificación para aprovechar el tiempo en el destino y conseguir conocer la mayoría de sitios posibles.
Por eso, para que puedas planear a la perfección tu viaje a Cuenca, te vamos a recomendar los sitios que no puedes perderte. Aquí te descubrimos qué visitar en Cuenca en dos días, ¡atento!
¿Qué visitar en Cuenca en dos días?
Cuenca, a pesar de no ser una ciudad muy grande, cuenta con un enorme patrimonio religioso (iglesias, conventos y monasterios) y una arquitectura civil muy interesante. Esto hace que resulte complicado conocer todos los rincones de la ciudad en dos días.
Pero aun así, si solo dispones de ese tiempo, la mejor opción es que busques un free tours en Cuenca, como los que puedes contratar en Guruwalk. Ya aclarada esta cuestión, veamos cuáles son los lugares de visita obligatoria en Cuenca.
Casas Colgadas
Está claro que uno de los mayores atractivos turísticos de Cuenca son sus Casas Colgadas. Se llaman Casas Colgadas, y no colgantes como muchos las llaman por equivocación, porque se asoman en el borde de un acantilado creando el efecto de estar suspendidas en el aire. Una de ellas, la Casa de la Sirena, se puede visitar porque alberga un mesón de comida tradicional, y otra, la Casa del Rey, contiene el Museo de Arte Abstracto Español.
Otro paisaje urbano muy similar al de las Casas Colgadas que podrás conocer en Cuenca es el conocido como los Rascacielos de San Martín.
Catedral de Santa María y San Julián
Esta imponente construcción es otro de los lugares de visita obligatoria de Cuenca. La Catedral de Santa María y San Julián tiene un marcado estilo gótico, aunque también tiene aportaciones románicas, barrocas y neogóticas.
La fachada en realidad es una reconstrucción del siglo pasado porque la original se derrumbó. Y esta catedral no es impresionante por fuera, ya que el juego de luces de las vidrieras y el efecto óptico que causan los arcos en el interior son espectaculares.
Y si te gusta la arquitectura religiosa, también podrías visitar el Palacio Episcopal, la iglesia de San Andrés, la Iglesia de San Miguel, el Convento de San Pablo o el Convento de la Merced.
Torre de Mangana
Esta torre se llama así por el reloj que posee, porque mangana era el reloj que se empleaba de referencia en una ciudad. Este monumento fue construido en el siglo XVI en el lugar que ocupaba un antiguo palacio andalusí.
La zona que rodea a la Torre de Mangana fue el barrio mudéjar, y posteriormente, la judería, aunque apenas quedan huellas de esas culturas.
Puente San Pablo
El Puente San Pablo tiene su origen en uno de piedra del siglo XVI, pero este se derrumbó, y se construyó el actual a comienzos del siglo pasado. El valor de este puente reside en las vistas que tendrás desde él de las Casas Colgadas.
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