El subdelegado del Gobierno de España en Cuenca, Juan Rodríguez, ha presentado la nueva campaña especial de la DGT sobre Control de las Distracciones al Volante junto al jefe Provincial de Tráfico, Jacinto Vicente, y el capitán del subsector de Tráfico de la Guardia Civil, Ángel Medina.
Desde hoy 16 de septiembre y hasta el próximo día 22 la Dirección General de Tráfico pone en marcha una campaña específica de vigilancia de las distracciones en la conducción, las cuales siguen siendo el factor concurrente más frecuente en los accidentes mortales. Durante estos 7 días los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, así como policías locales, intensificarán la vigilancia.
La que se presenta hoy se enmarca en la campaña ‘Operation Focus on the Road’ que desarrolla a nivel europeo la asociación RoadPol (European Roads Policing Network) y que este año la han hecho coincidir con la Semana Europea de la Movilidad.
El subdelegado del Gobierno ha insistido en que “las distracciones provocan accidentes por salida de la vía, choques con el vehículo precedente o atropellos que pueden tener desenlaces fatales”, por ello ha hecho de nuevo un “llamamiento a la responsabilidad de los ciudadanos para no poner en riesgo su vida ni la de los demás”.
Juan Rodríguez ha recordado que los “manos libres” son los únicos permitidos aunque tampoco están exentos de riesgos: distracciones, señales que no se ven, mayor tiempo de reacción, maniobras sin señalizar, entre otros. Así mismo ha señalado que es importante “disuadir a los conductores de llamar o coger el móvil mientras se conduce” pero también ha recordado que “como peatones debemos entender que el móvil también nos hace caminar ajenos a los riesgos viales cuando vamos abstraídos en una conversación”.
DISTRACCIONES EVITABLES
Apartar los ojos de la carretera, sea por la razón que sea, supone un riesgo.
Uno de los principales motivos que genera la distracción del conductor es la utilización del teléfono móvil durante la conducción. Su uso multiplica por cuatro el riesgo de sufrir un accidente y el riesgo es equiparable a la conducción con exceso de alcohol.
Un conductor que habla mientras conduce pierde la capacidad de mantener una velocidad constante, no guarda la distancia de seguridad suficiente con el vehículo que circula delante y el tiempo de reacción aumenta considerablemente (entre medio y dos segundos, en función de los reflejos del conductor). Además, a mayor velocidad mayor riesgo de que una distracción provoque un accidente: a 120 km/h, en 3 segundos, se recorrerá una distancia superior a la de un campo de fútbol.
La presencia del móvil en la conducción se ha incrementado de manera exponencial en los últimos años, provocando infinidad de accidentes. Por este motivo, el proyecto de ley que reforma el Texto Refundido de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, y que se encuentra actualmente en tramitación parlamentaria, prevé incrementar de 3 a 6 los puntos a detraer por conducir sujetando con la mano dispositivos de telefonía móvil.
Pero además del uso del móvil, es importante tener en cuenta otros factores que provocan distracciones como pueden ser, entre otros, fumar mientras se conduce, que multiplica por 1,5 el riesgo de sufrir un accidente; el sueño y la fatiga, factores de riesgo desconocidos pero que concurren en la accidentalidad vial, así como el uso de navegadores durante la conducción.