La Diputación de Cuenca ha recepcionado esta mañana los trabajos de ampliación y mejora del trazado de la CUV-8302 que une las localidades de San Clemente y Casas de los Pinos, una infraestructura que tiene una longitud total de más de 14 kilómetros y que gracias a esta inversión ha visto como se actuaba en el tramo de concentración de accidentes con el objetivo de implementar la seguridad de los usuarios que circulan por esta calzada. Esta vía es muy importante para la zona de la Mancha por el trasiego de vehículos agrícolas de gran tonelaje, sobre todo para atender el importante sector vitícola, así como debido al tránsito de camiones que realizan su trabajo en la industria agroalimentaria que está implantada en la comarca.
El presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, acompañado por la alcaldesa de San Clemente, Charo Sevillano, y el alcalde de Casas de los Pinos, Oliverio Ruiz, han sido los encargados de inaugurar esta obra que ya ha sido reabierta al tráfico. Además, en este acto también han estado presentes el vicepresidente, Francisco López, el diputado regional, Ángel Tomás Godoy, y el delegado provincial de Fomento, José Ignacio Benito; así como representantes de la empresa concesionaria del mantenimiento provincial de carreteras y miembros de las corporaciones locales.
El dirigente de la Diputación ha visitado los consistorios de Casas de los Pinos y de San Clemente y también ha aprovechado para llevar a cabo una entrevista en la emisora local sanclmentina donde ha destacado que esta carretera se ha convertido “en un referente a nivel provincial”, después de que los técnicos provinciales hayan trabajado con mucha diligencia para “solventar los problemas que han surgido con la empresa concesionaria”. Además, el presidente ha señalado la importancia de intervenir en lugares como este donde hay un punto de concentración de accidentes, ya que estas inversiones sirven para “salvar vidas”.
Martínez Chana ha señalado que el actual equipo de Gobierno está llevando a cabo una apuesta “decidida” por la Red Provincial de Carreteras y en estos dos años de legislaturas se ha invertido 4 millones de euros en adecuar más de 60 kilómetros repartidos por toda la provincia, además, ha avanzado que ya hay “varios proyectos que se encuentran en licitación” para continuar con esta senda de inversión en infraestructuras.
Esta carretera tenía un presupuesto inicial de 1,5 millones de euros y fue adjudicada a la empresa Aglomerados Albacete SA, que no cumplió con el contrato de adjudicación y desde el Servicio de Obras Provincial se inició los procedimientos de resolución de contrato, trámite que todavía sigue abierto; ante la necesidad de que esta vía estuviese abierta y debido a los daños que provocó el temporal Filomena, desde la Diputación de Cuenca se trabajó de manera urgente para que la obra fuese finalizada por la empresa concesionaria del servicio de mantenimiento de carreteras provinciales que han concluido los trabajos.
CUV-8302
La carretera CUV-8302 tiene una sección transversal entre 5 y 6 metros de anchura, y los 5,6 Km restantes (entre Casas de los Pinos y la N-301) tiene una sección trasversal entre 6 y 7 metros. La carretera tiene una intensidad media diaria (IMD) de 387 vehículos al día con un 3,13% de tráfico pesado. El tráfico pesado que frecuenta esta carretera es en gran porcentaje agrícola y relacionado con las labores vitícolas fundamentales en esta zona. Además se han implantado almacenes en industrias agroalimentarias en la zona lo que ha provocado un aumento del tráfico de camiones lo que genera inseguridad vial, fundamentalmente en los momentos de cruce de vehículos.
En los Estudios de Accidentalidad realizados por el Servicio de Obras Provinciales de la Diputación de Cuenca, se refleja la existencia de una Tramo de Concentración de Accidentes (TCA) en el tramo PK 4,7-5,7.
El objetivos de las obras ha sido el de mejorar del trazado y el ensanche de la plataforma es garantizar en cuanto a condicionantes de la infraestructura la máxima seguridad vial para los usuarios de la carretera, procurando la eliminación definitiva del Tramo de Concentración de Accidentes.
Las obras, se han realizado en 8,3 km entre las localidades de San Clemente y Casas de los Pinos, han consistido fundamentalmente en una ampliación de la plataforma y de la calzada existente, así como la mejora del trazado en planta y en alzado, mediante la eliminación de cambios de rasante, el suavizado del trazado en planta, y el aumento de la capacidad portante del firme, adaptando su sección a las cargas transmitidas en la actualidad por el tráfico pesado, eliminando la limitación de tonelaje, que se encontraba en 20 toneladas, favoreciendo la actividad económica de la zona.
Puntualmente se ha mejorado el trazado suavizando las curvas existentes, siendo el radio mínimo proyectado de 250 m, además de introducir curvas de transición, que hasta ahora no existían, también se ha sustituido las obras de drenaje transversal existentes por unas nuevas de 800 mm de diámetro mediante la instalación de tubos de hormigón armado de 135 KN/m2 de carga de rotura. Para garantizar el buen funcionamiento de la red de drenaje superficial se realizará una limpieza y reperfilado de las cunetas, de modo que la evacuación de las aguas de escorrentía sea lo más rápida posible. Se propone el hormigonado de cunetas en aquello tramos cuya pendiente longitudinal sea inferior al 1%.
En el capítulo de señalización se han sustituido las señales verticales obsoletas o en mal estado, además de adecuar la carretera al trazado nuevo y a la normativa actual. Se han pintado las líneas de eje y borde según normativa de señalización horizontal en todo el tramo acondicionado.
Esta inversión también ha servido para llevar a cabo una reordenación de accesos, permitiendo la incorporación de vehículos a la carretera desde las parcelas. Se ejecuta un acceso por cada dos parcelas, coincidiendo con la línea divisoria entre ambas. Tanto los caminos que intersectan con la carretera como los accesos a parcelas se ejecutarán mediante firme compuesto por una capa de zahorra artificial y una capa de MBC que evite, en la medida de lo posible, que los vehículos agrícolas ensucien la carretera.