Para evitar accidentes y proveer un espacio seguro y confortable a los más pequeños, existen una serie de consejos que podemos poner en práctica. También es conveniente conocer los productos diseñados especialmente para convertir el hogar en un entorno libre de riesgos.
Es responsabilidad de los mayores generar las condiciones óptimas para el desarrollo de bebés y niños. Y aunque un hogar parezca seguro para los adultos, muchas veces esconde riesgos para los más pequeños.
Afortunadamente, basta con prestar especial atención a algunos detalles y hacerse con los productos que nos ayuden a generar ambientes más seguros.
Hemos consultado algunas comparativas de misbebitos.com para conocer algunos artículos pensados especialmente para su seguridad. La información de esta página web puede ser muy útil a la hora de conocer las especificaciones técnicas y detalles de los mismos, así como también los mejores precios y las valoraciones de los clientes.
Seguridad del bebé: 10 buenos consejos
1. Revisar los materiales y certificaciones de chupetes y biberones
Se trata de un producto en contacto directo con su piel y las mucosas, por lo que debe estar elaborado con materiales libres de tóxicos.
En el caso de los biberones, además, la forma de la tetina puede estar provocando el consumo de gases, por lo que lo más recomendable es conocer los mejores biberones anti cólicos.
2. Colocar protectores en los enchufes
En cuanto se animan a gatear, el acceso a los enchufes puede ser un riesgo importante para su salud. Afortunadamente, existen protectores especialmente diseñados para impedir que pueda introducir sus dedos o elementos punzantes, al mismo tiempo que permiten su uso por parte de los adultos.
3. Supervisar que las puertas no representen un peligro
Tanto por la posibilidad de apretarse los dedos como por el riesgo que implica su apertura, las puertas son un aspecto a supervisar. Existen artículos diseñados para anular el espacio que queda entre su apertura y el marco, proclive a que aprete su mano o dedos.
Asimismo, hay dispositivos que permiten cancelar el funcionamiento de cerrojos y manillas, impidiendo la apertura de puertas.
4. A la hora del baño: bañeras seguras y temperatura adecuada
El momento del aseo es uno de los más propicios para accidentes y riesgos. Además de nunca dejarlos desatendidos, debemos controlar que la bañera sea segura y la temperatura – tanto del agua como del ambiente – sean adecuadas.
Para ello, podemos informarnos sobre las características que debe tener la mejor bañera de bebé y comprar un termómetro de agua, supervisando que la temperatura de la misma no exceda los 35 grados.
5. Hacer uso de vigilabebés
Estos dispositivos permiten mantener al bebé audible y, si incluyen cámara y pantalla, visible cuando no estamos en la misma habitación. Esto nos permitirá llegar a él con más rapidez en cuanto nos necesite, así como proteger su descanso y seguridad en todo momento.
6. Comprar una silla para coche que esté homologada por autoridades competentes en la materia
Este es uno de esos productos en los que no debemos buscar el más barato, sino el más seguro. Para asegurarnos de que así es, debemos informarnos sobre las certificaciones que la avalan.
Es importante controlar que la silla cumple con la Norma Europea de Seguridad y es adecuada para su tamaño, peso y edad.
También puede ser útil comprar un protector de asiento de coche para silla de bebé, ya que la misma pasará varios meses o años en ese lugar y podría dañar el tapizado del vehículo.
7. Alejar productos tóxicos de su alcance
Los medicamentos, productos de limpieza y cosméticos deben colocarse en espacios altos o cerrados a los que el bebé no pueda acceder.
8. Ventilar los ambientes donde se encuentra el bebé y mantenerlos libre de humo
Los ambientes ventilados son la mejor forma de evitar agentes contaminantes e infecciosos cerca del bebé. Además, en el caso de que hubiera fumadores en la misma casa, deberá mantenerse al bebé alejado de los ambientes donde exista humo de tabaco.
Está comprobado que el tabaquismo pasivo se asocia con un incremento de enfermedades respiratorias como el asma o la neumonía, además de aumentar las posibilidades de que se convierta en un futuro fumador.
9. Mantener su cuna o espacios de descanso lo más diáfanos posible
Los peluches, adornos y cojines deben ser retirados de la cuna antes de acostar al bebé. La cercanía de estos objetos puede provocar ahogos y perjudicar su descanso. La almohada no será necesaria antes de que cumpla un año.
10. Controlar la temperatura de los ambientes
Es cierto que los bebés, sobre todo cuando son recién nacidos, tienen una necesidad primaria de calor. Pero ese calor es el del cuerpo de sus padres, no el del ambiente. La temperatura en el casa debe mantenerse entre 20-22º C de día y 18-20º C por la noche.