El Tribunal Supremo ya se ha pronunciado definitivamente sobre la desviación de poder que había supuesto la decisión de la Junta de ampliar la ZEPA de la Laguna de El Hito, con el único fin de retrasar la construcción del ATC en Villar de Cañas. Tras ello, asistimos con asombro a un conjunto de declaraciones nuevamente contradictorias que van desde recurrir las sentencias firmes hasta defender la <<coherencia>> de una actuación que el Tribunal Superior de Justicia y el Tribunal Supremo han calificado precisamente como <<arbitraria>>, <<errática>> y <<contradictoria>>.
Entre tanto, hemos soportado exabruptos, palabras gruesas y mentiras feroces de quienes siguen utilizando la inversión de 1.500 millones de euros del Almacén Temporal Centralizado para sus intereses políticos. Quienes estamos en los ayuntamientos de manera circunstancial, porque tenemos profesiones reales a las que volver; quienes no recibimos ni un céntimo por nuestro cargo y sólo estamos aquí para ayudar a nuestra gente, no podemos asumir que se utilice un proyecto seguro, real y de futuro como un arma arrojadiza.
Se afirma, sin pudor, que el proyecto se empezó a construir sin los informes técnicos; que los terrenos no son idóneos y que el emplazamiento en nuestro pueblo es una decisión política sin respaldo geológico, técnico y medioambiental.
Tal cantidad de invenciones cae por su propio peso. Quien haya seguido -si quiera de forma esporádica- la tramitación por el Consejo de Ministros primero y por ENRESA, el Ministerio de Industria y el Consejo de Seguridad Nuclear, después, no le prestará la mínima atención.
Además, cuestionar la ubicación del ATC en Villar de Cañas es poner en duda la labor que desde hace años llevan a cabo ingenieros y técnicos de un gran nivel profesional y que, desde que se decidió su construcción aquí, han estado perforando cada palmo de nuestro pueblo para cerciorarse de que todo está bien. Cuestionar que el ATC se construya en Villar de Cañas no es cuestionar una decisión política, sino técnica.
Los informes avalan los terrenos del ATC en Villar de Cañas. Por eso ya hay construidos tres edificios: un vivero de empresas donde está instalada la fibra óptica, un laboratorio y un edificio de oficinas. Si el sentido común primara sobre los intereses políticos, ¡cuánto bien harían esos edificios estando en funcionamiento en un momento tan delicado de nuestra historia!
Cuando se cuestiona una decisión científica, al menos, que se usen argumentos científicos y no ideológicos. La decisión del Supremo elimina el único obstáculo artificial para seguir adelante con un proyecto que ya está en marcha. Dejen que continúe de forma tranquila, demuestren que velan por los intereses de nuestra tierra en lugar de por los de su partido. Los argumentos científicos están del lado del ATC y de Villar de Cañas; y el Tribunal Supremo lo ha vuelto a confirmar. Una buena parte del trabajo aquí ya está hecho. ¿Volverían a iniciar todo el proceso por una decisión electoralista de un gobierno regional?
La construcción del Almacén es imprescindible para dejar de pagar, diariamente, los 70.000€ que abonamos a Francia para que almacene una pequeña parte de nuestros residuos. El tiempo se agota y éstos deben volver. La construcción de un ATC es preceptiva y está incluida en el Séptimo plan de gestión de residuos nucleares que está tramitando el actual gobierno nacional. Porque, si la intención del Gobierno es cerrar las nucleares, el Almacén es el lugar para ello.
¿Cuál es el argumento para oponerse a un Almacén antisísmico, blindado para la radiación y de hormigón, en Villar de Cañas, pero asumir que los residuos de las dos centrales nucleares de la región estén al aire libre sobre placas del mismo hormigón (ATIs)? ¿por qué uno es peligroso y los otros dos no? ¿Por qué el ATC de Villar de Cañas es <<basura>> nuclear y los ATIs de Zorita y Trillo no?
Los expertos y el Ministerio reiteran que con Almacenes Individualizados (ATI) no basta; que deben almacenarse en uno solo (ATC). Son cuestiones técnicas. Saquen los intereses políticos del proyecto y hagan política de verdad para velar por los intereses generales de la Región.
El Almacén no es ni de derechas, ni de izquierdas; es una inversión industrial: la mayor en la historia de nuestra provincia. Cuenca ve cómo las políticas públicas regionales y nacionales se han olvidado de ella sistemáticamente. Somos distintos: una de las provincias más grandes, pero con menos población que el resto. La gran mayoría de nuestros pueblos tiene menos de 500 habitantes. La actividad industrial es muy limitada y nuestros pueblos viven de la agricultura, con pequeñas explotaciones cuyo relevo generacional no está asegurado.
Desde los ayuntamientos llevamos luchando contra la despoblación desde hace décadas, antes de que saliera al debate público. ¿alguien que conozca Cuenca y nuestros pueblos sería capaz de rechazar que una industria tan potente como ésta es un antídoto contra la despoblación de toda la provincia? No se trata de ideología, sino de las personas. Alejen de la lucha política un proyecto que es solo técnico; y cuyo emplazamiento en Villar de Cañas ha sido defendido por el Tribunal Supremo hasta la extenuación.
La oposición irracional a esta inversión solo puede venir del desconocimiento de nuestra realidad. Lo evidencian en las decisiones que toman en muchos ámbitos. Lo de la Junta no es coherencia, es terquedad. Lo de los que defienden las decisiones de la Junta contra Cuenca no es ignorancia, es desidia.
Por otro lado, y cuando no se tienen argumentos reales contra una inversión segura, con frecuencia se suele acudir al insulto y a sembrar sospechas sobre los <<verdaderos>> intereses de los demás. Huyan de este debate estéril que no aporta y que resta credibilidad a quienes lo fomentan. Nuestro único interés como Ayuntamiento es luchar por el desarrollo de nuestro pueblo. No vivimos de la política. Somos gente honrada y sencilla que sólo quiere lo mejor para nuestra provincia.
Así que dejen de considerarnos estúpidos. No, no van a instalar un parque eólico en Villar de Cañas. Se va a construir a unos 30 km de nuestro pueblo y, como mucho, llegará a tocar a un pueblo vecino. Pero bienvenido sea: Bienvenidas sean todas las inversiones, porque no son incompatibles con el ATC, sino perfectamente complementarias.
Nuestra provincia está tan abandonada en cuanto a inversiones reales que necesita mucho más. Que se construya el parque eólico, que se construyan plantas solares (en Villar de Cañas ya hay dos huertos solares, pero que construyan los que quieran; si tenemos de algo, es terreno llano). Que se construya lo que ayude a la provincia, pero que no se utilice como un chantaje contra la inversión de 1.500.000.000 € que supone el ATC.
No en vano, siempre nos quedará la duda de si la Junta se hubiera planteado alguna inversión en nuestra zona si no estuviera proyectado el ATC aquí. Considero que todos sabemos la respuesta.
Dejen a los técnicos hacer su trabajo, escúchenles y no pongan más palos en las ruedas por el bien común.
Alejandro Pernías Ábalos
Concejal contra la Despoblación y de Desarrollo Rural del Ayuntamiento de Villar de Cañas