Científicos de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) han realizado un exhaustivo estudio sobre la mortalidad en Castilla-La Mancha. Los investigadores reportaron que las principales causas de defunciones en la región son enfermedades cardiovasculares e isquémicas del corazón.
Otras de las afecciones con altas tasas de mortalidad son los tumores, ya sea de cáncer de pulmón o de mama, así como el alzheimer y la diabetes mellitus. De esta última, así como las enfermedades cardiovasculares, se desprenden problemas en la alimentación de la población.
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de defunción en todo el mundo. Se estima que de aquí al 2030 casi 23,6 millones de personas fallecerán por alguna enfermedad cardiovascular, principalmente por cardiopatías y accidentes cerebrovasculares. “El ejercicio de forma regular es imprescindible, así como mantener un peso saludable y bajar el colesterol y presión arterial. Cambiar los hábitos hoy puede prevenir un paro cardiorespiratorio mañana”, refiere la redactora de Salud & Fitness Reviewbox, Paola Lemus.
Las defunciones por problemas cardiovasculares están asociados a una mala alimentación. Por ejemplo, en México —el segundo país con mayor tasa de sobrepeso y obesidad—, el 19% de mujeres y hombres de 30 a 69 años muere de enfermedades cardiovasculares, y se estima que el 70.3% de la población adulta vive con al menos un factor de riesgo cardiovascular. En España la situación no es muy alentadora.
Publicación de resultados
Los resultados de la investigación han sido recogidos en el “Atlas de Mortalidad en Castilla-La Mancha (2003-2014)”, publicado por la editorial Bomarzo de Albacete. El atlas incluye mapas con una estimación del riesgo relativo en cada municipio.
“Al conocer estas estimaciones del riesgo es posible identificar agrupaciones de municipios en las que existe una mayor mortalidad con respecto al promedio en Castilla-La Mancha”, refiere el equipo de investigación.
Además, el atlas permite visualizar la evolución del riesgo en los municipios de Castilla-La Mancha durante el período de estudio. Los científicos han señalado que los resultados muestran cómo la mortalidad por algunas casas tiene una tendencia temporal decreciente, en tanto que aumenta por otras.
En tanto, el atlas cuenta con un análisis de la población de la comunidad, en el que se confirma gran cantidad de municipios con una población pequeña (menor de 5.000 habitantes) en muchas partes de la comunidad autónoma. También se evidencia una inclinación al despoblamiento de los municipios de menor tamaño. Estas localidades forman parte de la denominada ‘España vaciada’.
Por otra parte, los datos relacionados a la población y defunciones han sido adquiridos al Instituto Nacional de Estadística (INE), mediante un convenio de cesión de datos regulado por el Protocolo de cesión de ficheros finales de microdatos de defunciones, de acuerdo con la causa de muerte, del Instituto Nacional de Estadística a la Universidad de Castilla-La Mancha para el desarrollo del proyecto Modelos Jerárquicos Bayesianos en Medio Ambiente, Oncología y Salud.