“Una obra de arte” Con estas cuatro palabras el autor de la copia de la tabula defixio romana y especialista en religión romana, ha definido esta tablilla de maldición encontrada en la ciudadela ibera visitable de Fuente de la Mota y que en la actualidad se exhibe en el Museo de Cuenca. Gracias a la labor del arqueólogo, Antonio Madrigal y del Ayuntamiento de Barchín del Hoyo a partir de ahora el Centro de Recepción de Visitantes del Yacimiento dispone de una copia perfecta de esta execración grabada con la misma técnica que se empleó hace dos milenios para crear la original. La ‘defixio’ constituye hoy en día uno de los grandes misterios del asentamiento de Fuente de la Mota y es uno de sus atractivos sin resolver “hace más de dos milenios alguien, cuya identidad desconocemos maldijo, entre otras personas, a Nicias y a Time y para que esa conjura alcanzara su objetivo mandó grabar esta pieza en plomo” señala Antonio Madrigal. Gracias a la labor de Marco Almansa, ahora disponemos de mayor información sobre esta pieza en particular y en general acerca de este tipo de maldiciones que eran habituales en el mundo romano. Según el investigador las defixio eran piezas de encargo que se inscribían en latín o en griego, existiendo muy pocas como ésta, escrita en ambas lenguas. El propósito del uso del griego era evitar una contra maldición “ya que para que la contra maldición surtiera efecto debía conocerse esa misma lengua y en este sentido el griego suponía un obstáculo cultural insalvable para la mayor parte de la población de la ciudadela, que no poseían ese conocimiento en lenguas”. Por lo general, estas piezas se encargan a “escribas” locales o itinerantes, incluso había un mercado de estas creaciones de plomo y objetos religiosos de naturaleza similar. Pero en este caso, se trata de una defixio personalizada a la que se supone un coste elevado de manera que no estaba al alcance de todos los habitantes del poblado
Marco Almansa explicó la técnica del grabado de las inscripciones en plomo frío y añadió información muy relevante para la comprensión de la maldición, de manera “que ahora podremos ofrecer más datos a nuestros visitantes y complementar lo que ya sabemos además de visionar la copia preservando la defixio original” destaca Antonio Madrigal.
Por otro lado, la Asociación Cultural Iberos de Barkin que busca la difusión de la cultura ibérica y trabaja conjuntamente con el Ayuntamiento en el desarrollo de la Feria Ibera de Barchín del Hoyo y diversos eventos de la misma naturaleza, ha adquirido diversas piezas de uso recreacionista: como un casco italocalcídico, dos escudos, túnicas y piezas de esparto. Todo este material será exhibido junto a la “defixio” en el Centro de Recepción de Visitantes y enriquecerá la exposición mientras no sea necesario su uso para las actividades culturales de la Asociación.
De este modo, el entorno cultural de Barchín del Hoyo se ve muy reforzado y supone un nuevo atractivo en su oferta cultural vinculada a su yacimiento ibérico, el único prerromano visitable en la provincia de Cuenca.