La flota de transporte público urbano de la ciudad de Toledo ha incorporado este martes dos nuevos vehículos de gas natural comprimido con “el máximo confort y nuevas medidas de seguridad”, tal y como ha destacado la alcaldesa, Milagros Tolón, a través de sus redes sociales, destacando que esta medida refuerza el compromiso de Toledo con el medio ambiente y la sostenibilidad con una flota cerca al cien por cien de gas.
El edil de Movilidad, Juan José Pérez del Pino, y el gerente de Unauto, Ramón Martínez, han sido los encargados de supervisar estos dos nuevos vehículos y de presentarlos ante los medios de comunicación ofreciendo toda suerte de detalles en torno a sus características y confiando en que “el servicio que prestarán será apreciado por los toledanos”.
Según ha detallado el edil, estos dos nuevos autobuses sustituyen a otros dos que habían alcanzado su “vida útil” de doce años y que habían recorrido un total de 740.000 y 790.000 kilómetros, respectivamente, con lo que “podrían haber ido y vuelto a la Luna”, ha explicado.
También ha destacado que con estas dos nuevas adquisiciones, Toledo suma ya un total de 47 autobuses de gas, siendo el total de la flota de 49 por lo que “cuando proceda, sustituiremos los dos restantes por gas”, ha dicho.
Características
Asimismo, Pérez del Pino ha manifestado que se trata de dos autobuses de la fábrica SCANIA de aplicación urbana, dotados de piso bajo continuo con 81 plazas, rampa de acceso a personas de movilidad reducida en la puerta central y espacio interior para una o dos sillas de ruedas en la parte central.
El tipo de combustible almacenado es gas natural comprimido y como características más destacadas incorpora una mampara trasera en el asiento del conductor en metacrilato incoloro; el sistema de prevención de colisiones Mobileye que advierte de alertas tanto visuales como de audio unos segundos antes de una posible colisión; cámaras de seguridad; antivaho calor o equipo DAFO de extinción de incendios, entre otras.