Para Ecologistas en Acción la capital no está preparada para la desescalada
martes 28 de abril de 2020, 14:42h
Los modos de transporte urbano van a cambiar (ya están cambiando). Por un lado de forma obligada, tanto por la normativa sobre distanciamiento social como por la lucha contra el cambio climático. Pero también por los nuevos hábitos individuales y colectivos que se implantarán tras el confinamiento.
Las ciudades españolas y el Gobierno Central, están planificando medidas de movilidad de cara a la desescalada. Así Madrid estudia más espacios para peatones, Barcelona la puesta en marcha de 21 km nuevos de carriles bici, Valencia también apuesta por la bicicleta y Teresa Ribera, ha anunciado su decidida apuesta por la bicicleta para la movilidad que se nos avecina.
En la etapa de desescalada del confinamiento es crucial buscar un modelo de movilidad diferente, pues aunque se establezcan horarios escalonados de entrada y salida del trabajo, está claro que los modos colectivos pierden protagonismo.
Pero la nueva situación no puede dar todavía más prioridad al coche particular por dos razones: por un lado porque el centro de las ciudades (incluida Cuenca) no tienen capacidad de absorber más tráfico en coches, que además deben reducir los pasajeros. Y por otro, porque la lucha por el descenso de la contaminación y en defensa del clima, no se lo pueden permitir. La Crisis Climática es en cifras y hechos mucho más devastadora y peligrosa que el Covid19.
Medidas para Cuenca
Este miércoles se llevará a cabo una reunión entre el concejal de movilidad y Medio Ambiente, Adrián Martínez y diferentes colectivos (Fridays for Future, Ecologistas en Acción, Amigos de los Ríos de Cuenca, Limpiando Cuenca , Asociación de Padres Madres y Alumnos de Cuenca y Club En Ruta) que le trasladarán una serie de propuestas. Para Fridays for Future y Ecologistas en Acción, las acciones tienen que ver con tres aspectos prioritarios, algunos de los cuales hay que abordar de forma inmediata:
Primero la ineludible necesidad de disponer ya de espacio público para los peatones, pues hay zonas concretas en el centro de la ciudad donde es imposible mantener el distanciamiento social por lo exiguas de las aceras especialmente en los pasos de peatones: Algunos ejemplos son, la zona de Cuatro Caminos y el nudo de Cervantes, Hurtado de Mendoza, Fermín Caballero y Poeta Diego Jesús Jiménez. La única solución factible es reducir plazas de aparcamiento en superficie (facilitando el aparcamiento subterráneo) y pasar a peatonales uno a más carriles cuando existan carriles dobles o triples en el mismo sentido.
El segundo aspecto que se podrá plantear a medio plazo es ampliar las aceras en zonas de transito habitual de peatones donde apenas hay espacio para el cruce de peatones sin rozarse y especialmente para personas con movilidad reducida. Con ejemplo de estas calles, se pueden mencionar: Ramón y Cajal, Las Torres y Camino Cañete. Como solución de urgencia se podría marcar una única dirección para cada acera.
El tercer aspecto es el de fomentar el uso de la bicicleta como medio seguro de transporte puesto que permite el distanciamiento social y descongestiona el transporte público. Para ello, es necesario mejorar y ampliar los carriles bici, calmar el tráfico permitiendo la convivencia en algunas calles, colocar más aparcabicis, permitir el paso de bicicletas a baja velocidad en zonas peatonales, ingreso de Cuenca en la Red de Ciudades por la Bicicleta y colocar en los autobuses enganches externos para las bicicletas. También es indispensable que el ayuntamiento y los colectivos sociales desarrollen una campaña de fomento del uso de la bicicleta en una ciudad de escasa cultura en el uso de la bici urbana,