El conquense Iván Vélez investiga sobre la fría cultural con 'Nuestro hombre en la CIA'
domingo 26 de abril de 2020, 12:15h
La figura del dramaturgo Pablo Martí Zaro, su vinculación con la Fundación Juan March, de la que depende ahora el Museo de Arte Abstracto de Cuenca, y su paso "por algunos de los despachos más importantes de la guerra fría cultural", centra la investigación realizada por el conquense Iván Vélez, publicada ahora en un libro, 'Nuestro hombre en la CIA. Guerra fría, antifranquismo y federalismo'.
Tras indagar varios años en los papeles de la Fundación 'Pablo Iglesias', y en concreto en el Fondo 'Martí Zaro', esas averiguaciones se recogen en un ensayo de 322 páginas, con prólogo de Gustavo Bueno, publicado este mes de abril por 'Ediciones Encuentro'.
Documentos necesarios, en parte, "para entender la historia de España del último medio siglo", y que se complementan con la información extraída de entrevistas realizadas por Vélez a Ramón Tamames, Raúl Modoro, Juan Velarde, o Enrique Múgica, este último fallecido recientemente.
En la obra, este investigador asociado de la Fundación 'Gustavo Bueno' aborda cómo organizaciones estadounidenses estimularon en los años sesenta del siglo pasado una corriente antifranquista, que a la vez pretendía alejar a España de la órbita comunista.
La "ordenada y meticulosa labor" de Martí Zaro ha permitido reconstruir las actividades impulsadas entonces por el Comité español del Congreso por la Libertad de la Cultura (CLC), que ayudan a entender la socialdemocracia actual.
Vélez (Cuenca, 1972), reconoce que el Museo de Arte Abstracto Español (Fundación 'Juan March'), creado en 1966 en las populares Casas Colgadas de la ciudad de Cuenca, es un ejemplo de cómo Estados Unidos incitó "el expresionismo abstracto" frente a "la pintura figurativa soviética".
En el anexo documental de la publicación, Vélez apunta, entre otras cosas, que Pablo Martí Zaro (1920-2000), quien asistió al 'Contubernio de Múnich', recibió de la Fundación 'Juan March' "una pensión literaria dotada con 75.000 pesetas" en el año 1958.
Cuenca también vio nacer a Federico Muelas (1909-1974), quien también aparece en las páginas de esta obra, que plasma además la relación entre fundaciones americanas como la Ford y el Banco Urquijo o la conexión entre CLC y la CIA. Además, pone en el contexto de la época nombres propios como Julián Gorkin, Enrique Tierno Galván (exalcalde de Madrid), el escritor José Luis Sampedro o el falangista Dionisio Ridruejo.
Este último, relata Vélez, fue protagonista de un destacado encuentro celebrado en l’ Ametlla del Vallès (Barcelona), en la masía de Félix Millet, que sirvió para consolidar "un proyecto cuya meta era la España federal (...), que tenía como elementos a unas regiones en las cuales había arraigado un nacionalismo de fuerte impregnación católica", reza el texto.
Décadas después, según Vélez, el actual sistema autonómico, "sustentado ideológicamente por colectivos como los analizados en esta obra", ha mostrado hasta qué punto "debilitan la acción de la nación española", como se ha podido observar en la crisis de salud pública que vivimos.
Sin embargo, para Vélez, el fuerte europeísmo de los que aparecen en sus páginas ha tenido un "rotundo éxito", puesto que España, hasta ahora, "es el país con mayor fe europeísta", si bien, opina, esta crisis sanitario por coronavirus "hará mella en este credo".
A lo largo de una veintena de capítulos, titulados por ejemplo 'Curas rojos, verdes dólares' o 'Fastos machadianos', aparecen multitud de documentos sobre ese mecenazgo. También nombres como el de Vicente Gállego, uno de los fundadores de la Agencia Efe, además de una batería de diarios y revistas, como 'Arriba', 'Ateneo' o 'Triunfo'.
El escritor y arquitecto, autor de obras como 'Sobre la leyenda negra' y colaborador de 'El Catoblepas', desvela además que, durante este confinamiento, analiza textos vinculados a Cuenca para preparar su próximo trabajo, que versará sobre la Inquisición.