El presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, mantuvo ayer una conferencia telemática con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, la presidenta de la FEMP, Tita García, y los presidentes de las otras cuatro diputaciones de la región para evaluar la situación sanitaria que vive la región, así como las perspectivas económicas que se abren después.
En esta reunión el máximo dirigente del ejecutivo provincial ha mostrado su compromiso de “sumar esfuerzos” en la situación económica que atravesará la región cuando se supere la crisis sanitaria provocada por el Covid-19. En este sentido, Martínez Chana ha destacado que todas las instituciones tendrán que “arrimar el hombro” y la Diputación de Cuenca no será menos.
El presidente ha señalado que esta colaboración y coordinación institucional es un imperativo moral de la ciudadanía, “la gente no entendería otra cosa en estos momentos de dificultad”. Desde la Diputación están convencidos que hay que habilitar líneas de ayuda para aquellos sectores de la población que más afectados se están viendo durante la crisis sanitaria como los autónomos o las pymes.
Desde la institución provincial se han habilitado medidas para flexibilizar el pago de los tributos a toda la ciudadanía conquense, así como adelantar a los ayuntamientos los fondos de recaudación para que tengan liquidez y puedan hacer frente a gastos imprevistos.