El manejo de la sospecha de infección de prótesis de rodilla en Atención Primaria y en los servicios de Urgencias en el área de Salud de Cuenca ha centrado el asunto de la Sesión Clínica desarrollada en el Hospital Virgen de la Luz y presentada por la doctora, María del Pilar Peña, facultativo del Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica del centro sanitario conquense.
Según ha explicado el objetivo de este encuentro pasaba por lograr un tratamiento correcto de los pacientes intervenidos de prótesis de rodilla, no subestimar esta patología, no abusar de los antibióticos, el uso correcto de los mismos en función del tipo de infección y saber cuándo y cómo actuar en este tipo de casos.
La doctora fue detallando a los profesionales sanitarios del Área de Salud que participaron en esta Sesión los cuatro tipo de infecciones que pueden producirse, ya sea una infección aguda cuando no ha trascurrido un mes de la intervención; una infección crónica, pasado un mes de la intervención; una infección hematógena, es decir, secundaria después de otro tipo de infección, o la infección que se diagnostica al cultivar el material protésico retirado tras un fracaso del implante.
En cuanto a la forma de actuar, la traumatóloga explicó que ante una sospecha de infección aguda, con calor local y la rodilla enrojecida, el paciente se debe derivar directamente a Urgencias en donde se le deben solicitar una serie de estudios analíticos (hemograma, velocidad de sedimentación, PCR) y a partir de ahí valorar si hay que realizar una artrocentesis, es decir, una punción articular y una extracción de una muestra del líquido sinovial para su estudio bioquímico y, posteriormente, estudiar si los parámetros están alterados y es o no necesario proceder a una nueva intervención.
“No queremos que los pacientes sean tratados con antibióticos convencionales al pensar que se trata de una pequeña infección. Queremos que esa infección sea tratada correctamente y no nos enmascare el germen productor”, ha indicado la doctora Peña que hizo hincapié en que todos los profesionales deben conocer que una infección de prótesis debe tratarse con dos tipos de antibióticos, no con uno solo, y con un tipo de antibióticos que penetren y lleguen a la prótesis.