El diputado regional del Partido Popular por la provincia de Cuenca, José Manuel Tortosa, ha denunciado que el Hospital Virgen de la Luz sigue sin la sala de hemodinámica prometida en varias ocasiones por el Gobierno de Page.
Según ha recordado Tortosa, este recurso sanitario ya lo prometió Page en plena campaña electoral cuando haciendo uso indebido de los correos electrónicos institucionales de los profesionales sanitarios del Virgen de la Luz, envió un email electoralitas y propagandístico con su “supuesto” programa de actuación sanitaria para Cuenca, donde incluía la sala de hemodinámica entre sus planes a medio plazo.
Lo más grave, proseguía el popular, es que justo hace un año, el 30 de agosto de 2017, el propio consejero de Sanidad de Page vino a Cuenca a hacerse la foto y a prometer que el Hospital Virgen de la Luz tendría su sala de hemodinámica en funcionamiento en abril o mayo de este año y que supondría una inversión cercana a 150.000 euros.
Según la propia nota de prensa de la Consejería, este nuevo recurso ahorraría a los pacientes conquenses los traslados que antes tenían que realizar a otros hospitales, como Albacete, para hacerse un cateterismo cardíaco o cualquier otra prueba.
“¿Qué ha pasado con esta promesa? ¿Es que el Gobierno de Page la anunció pero no la presupuestó? ¿O es que la incluyó pero no la ha ejecutado, como muchas otras partidas presupuestarias? ¿O quizá es que se ha gastado esta cantidad en otra cosa?”, se preguntaba Tortosa al incidir en que es “vergonzoso” que Page haya sido incapaz de invertir una cantidad tan pequeña dentro del presupuesto regional, y, por lo tanto, de mejorar la calidad sanitaria de los conquenses y evitar el desplazamiento de muchos pacientes a otros centros hospitalarios de la región.
Por ello, el diputado del PP ha pedido al Gobierno de Page y a los responsables del Sescam que informen sobre cuántos pacientes han tenido que desplazarse desde Cuenca a otras provincias castellano manchegas y el coste que esto ha supuesto por la Ley de Garantías; “¿o es que el dinero público, como dice la vicepresidenta del Gobierno de Sánchez, no es de nadie?”, se cuestionaba.
Asimismo, Tortosa ha recordado como el Grupo Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha ha presentado enmiendas a los Presupuestos regionales para incrementar la transferencia corriente al Sescam para la puesta en marcha de la unidad de Hemodinámica de Cuenca, “contando siempre con el voto negativo del PSOE, entre ellos Guijarro y Torralba”.
“INCREMENTO LISTAS DE ESPERA CARDIOLOGÍA”
El dirigente del PP también ha denunciado como las listas de espera relacionas con la especialidad de cardiología han incrementado considerablemente, casi el doble, desde que Page es el presidente de Castilla-La Macha, teniendo en cuenta, lamentaba Tortosa, que encima éstas han sido “maquilladas y falseadas”.
En concreto, se ha referido a la lista de espera quirúrgica de angiología y cirugía vascular, que ahora tiene un tiempo medio de espera de 98,13 días, mientras que en junio de 2015, tras una legislatura de Gobierno del PP, era de 48,22 días. O a la lista de espera de consultas externas de cardiología, que en julio de este año era de 36,07 días de media, y en junio de 2015 se situaba en los 22,64 días.
Ante este panorama, Tortosa se ha preguntado por qué el Gobierno de Page ha sido incapaz de invertir en el área sanitaria gran parte de los 1.012 millones de euros de más que este año tiene el presupuesto de Castilla-la Mancha gracias al Gobierno de Rajoy, “contratando más profesionales sanitarios y, por lo tanto, reduciendo de verdad las listas de espera”.
“Mucho nos tememos que estamos volviendo a épocas oscuras, de deudas y facturas en los cajones, como sucedió en el año 2011 cuando el PP entró en el Gobierno de Castilla-La Mancha, tras casi 30 años de gestión socialista con Bono y Barreda al frente y con la complicidad de Page, que se encontró una deuda de 12.800 millones de euros, y que, por cierto, hoy ya se sitúa en los 14.444 millones de euros”, alertaba el popular.
En este sentido, ha recordado como el PSOE dejó en el área sanitaria una deuda de 5.000 millones de euros, lo que provocó que miles de proveedores se quedaran al borde de la ruina. Además, dejaron 158.795 facturas sin pagar en el Sescam por valor de 1.092 millones de euros, de los que más de 9 millones son de facturas de luz, 35 millones de prótesis e implantes y 12,2 millones de lavandería.
A esto se suma los 200 millones de deuda socialista con hospitales privados, el agujero de 400 millones de euros de deuda con las farmacias y la deuda de 77 millones de euros en los centros de salud.