Cuenca se ha convertido en la sede nacional de la novedosa Academia de perfeccionamiento de elencos vocales, coros y orquestas asociadas a la veterana Semana de Música Religiosa (SMR) con el objetivo de lanzar al mercado laboral a jóvenes talentos que tendrán una nueva oportunidad en los castings del próximo mes de septiembre.
El Teatro Auditorio conquense, el mayor espacio multiuso de la capital, acoge las clases de perfeccionamiento de los alrededor de 80 chavales que se forman en esta Academia, después de haber sido seleccionados entre la multitud de candidatos que se presentaron a las pruebas de acceso realizadas en todo el país el año pasado.
Entre ellos, un 20 % de jóvenes promesas de Castilla-La Mancha y "4 o 5" de Cuenca, una ciudad con gran tradición de formación vocal según ha destacado, en declaraciones a Efe, Cristóbal Soler, el director artístico de la Academia a la vez que director de la SMR, cuarto festival de música más antiguo de España que atrae a la ciudad cada año a melómanos de todo el mundo.
Soler, creador de orquestas de jóvenes intérpretes y presidente fundador de la Asociación Española de Directores de Orquesta, ha sido el impulsor de esta academia, que empezó a caminar el año pasado cuando fue nombrado director del festival y que ha querido relanzar, renovar y, sobre todo, acercar a todos los públicos, dado que la música debe ser "un derecho universal", insiste.
Según Soler, esta Academia, con "coah" a lo 'Operación Triunfo', pretende ser un punto intermedio entre la finalización de la formación y el acceso al mundo laboral de los jóvenes talentos, que les permite, además, compartir vivencias y estancia en una residencia de la capital, ocupada estos días por unas noventa personas, entre alumnos y profesores.
Soler ha avanzado que los castings para la próxima edición, que empezarán en octubre, se llevarán a cabo después del verano en todos los puntos del país por parte de un cualificado tribunal gracias al respaldo de los siete patronos de la SMR, entre los que están, entre otros, Diputación y Ayuntamiento de la ciudad, y Junta, cuyo Gobierno regional ha aportado una partida extraordinaria para poder impulsar esta Academia con sede en la ciudad de Cuenca.
"Queremos seguir descubriendo grandes talentos y traerlos a la Academia. La idea es que sea un trampolín y crear un proyecto profesional", ha destacado Soler, un valenciano de 50 años que empezó a los siete a estudiar música.
Los que participan actualmente en esta Academia, que rondan la veintena (aunque algunos tienen 16 años), fueron seleccionados en los que se realizaron en la Escuela Superior de Canto de Madrid o en el Conservatorio Profesional de Música de Valencia, entre otros.
Entre ellos Rajif que, en conversación con Efe, ha explicado que lleva casi una década formándose en varios coros semiprofesionales de Madrid y que sueña con ser cantante profesional.
Uno de sus retos es continuar su formación en otros países y poder vivir de ello, como Lucía González, quien destaca que la formación que se ofrece en esta Academia "es la más completa".
"No existe este formato en España, sólo en Cuenca; la lírica es algo minoritario. Es una maravilla", agrega Lucía, de 21 años y que lleva desde los cinco en la música, primero tocando el piano y después la flauta travesera para completar sus estudios superiores en el Conservatorio y con máster.
"Puede ser un buen trampolín entre la formación académica y la vida profesional. Me gustaría trabajar en algún teatro", señala a Efe en uno de los descansos de sus clases de canto bajo la mirada de Soler y Carlos Lozano, director de coro.
También forma parte de esta Academia Glenda, joven cubana afincada en Valencia, dedicada a la interpretación operística, que formó parte del coro de cámara, la orquesta y el grupo de solistas de la Academia de la Semana de Música Religiosa que arrancó en diciembre con la interpretación del 'Mesías' de Händel.
El próximo 7 de abril la Academia SMR, dentro de la programación de la 57 edición, ofrecerá 'El pequeño deshollinador', una coproducción de la Escolanía Ciudad de Cuenca y el Teatro Auditorio realizada en el año 2011, que fue la primera producción de ópera realizada íntegramente en Cuenca y que ha sido cedida al reciente proyecto de la Academia dentro de la SMR.
La ópera, concebida en un solo acto y tres escenas, fue compuesta por Benjamin Britten en 1949 y estrenada ese mismo año en el Festival de Aldeburgh.
Lorena Mayordomo
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