El Obispo de Cuenca, Monseñor José María Yanguas, presidirá el próximo domingo 28 de enero a las 17:00 horas la Misa Solemne y Acto de Apertura del Año Jubilar de San Julián en la Catedral de Cuenca que se prolongará hasta el próximo 31 de diciembre de 2018. Acto al que está invitada toda la Diócesis de Cuenca.
Responde la celebración de este Año Santo a la petición del Cabildo de la Catedral de Cuenca dirigida a la Penitenciaría Apostólica solicitando ‘la gracia de celebrar cada diez años, y más concretamente los acabados en “ocho” un Año Santo Juliano’. La razón de esta petición es conmemorar siempre el inicio del pontificado de San Julián en 1198 así como el año de su fallecimiento 1208. Petición que elevó a la Penitenciaría Apostólica el Obispo de Cuenca, Mons. José María Yanguas, otorgándole su apoyo y aval ‘haciendo propia la idea de que la celebración de un Año Jubilar habría de ser fuente de múltiples gracias para la Iglesia de Cuenca, en particular la del fortalecimiento de la vida eclesial por el ejercicio de la caridad’.
Mediante Decretos fechados el 12 de enero de 2018, la Sagrada Penitenciaría concedía el Año Santo Juliano solicitado, ‘de manera que los fieles podrán ganar la Indulgencia Plenaria visitando en peregrinación la Catedral y participando allí en alguna celebración jubilar, o bien orando durante algunos momentos ante los restos de San Julián, todo ello cumpliendo las condiciones acostumbradas’.
El Obispo de Cuenca ha dirigido con este motivo una carta a todos los fieles diocesanos, a los sacerdotes, religiosas y laicos invitándoles a participar en esta Solemne Eucaristía en la Fiesta de San Julián y al Acto de Apertura del Año Santo, deseando que ‘la figura y el ejemplo de San Julián, verdadero padre de los pobres, nos aliente a favor de una fe cada vez más arraigada, de una caridad cada vez más vigorosa y eficaz, y de una esperanza que llene de gozo nuestros días’.
El Cabildo de la Catedral de Cuenca ya ha comenzado por su parte a trabajar para que este Año Jubilar resulte fructuoso y se encuentra preparando diversos materiales (cartel, estampas con la oración del Año Santo, catequesis, ceremonias, y diversos actos, etc). Próximamente en la página web de la Catedral estará todo este material a disposición de la Diócesis, así como un formulario para cuantas parroquias, movimientos, asociaciones, grupos apostólicos y fieles deseen acudir a la Catedral a ganar el Jubileo.
Tanto las celebraciones habituales de la Catedral, Misa Coral a las 9:20 horas de la mañana todos los días de lunes a sábados, y las celebraciones de la Misa Dominical a las 12:30 horas ya están abiertas a cuantos fieles deseen acudir a la Catedral a ganar el Jubileo a lo largo del año tras la apertura del Año Santo.
El Cabildo de la Catedral se pone a disposición de todos los diocesanos para cuantos deseen visitar el primer Templo de la Diócesis y ganar el Jubileo.
Esta misma tarde y en colaboración con la Archicofradía de San Julián ha dado comienzo en la Parroquia de San Fernando de la Ciudad de Cuenca el Solemne Triduo de preparación a la Fiesta de San Julián, y que se tendrá también los próximos días 25 y 26 de enero a las 18:45 horas, para concluir el 27 de enero a las 17:00 horas con las Solemnes Vísperas de San Julián en la Catedral de Cuenca que serán presididas por el Deán del Cabildo Catedral D. José Antonio Fernández Moreno.
El 28 de enero a las 17:00 horas se celebrará la Solemne Apertura del Año Santo en la Catedral por parte del Obispo de Cuenca, en el que la reja del Transparente, que cierra la urna del Patrón de Cuenca, será abierta y así permanecerá abierta a lo largo de 2018, como símbolo del año santo. Para terminar estos actos con la Misa por los Difuntos que se tendrá al día siguiente 29 de enero a las 17:00 horas.
Uno de los símbolos que recuperará el Cabildo para el Año Santo como ya hiciera en del 2008, será el Arca de San Julián. Emulando la caridad de San Julián, el Cabildo de la Catedral instituyó, a principios del siglo XV, la llamada “Arca de San Julián o de la limosna”, que sirvió para atender las necesidades de los pobres, dar limosna de pan a diario desde la Catedral, atender y educar niños... El Arca, que existió hasta tiempos bien cercanos, se nutrió siempre de un capital que se incrementaba con aportaciones de los fieles y de los obispos que se sucedieron en el gobierno de la diócesis. Algunos de ellos empeñaron joyas a favor de este Arca y de los más pobres.
En este Año Santo de nuevo se recupera este Arca de la Limosna como símbolo de caridad. Será instalada a los pies del altar de San Julián. Con las aportaciones de los peregrinos el Cabildo de la Basílica conquense acometerá, como fruto del Año Santo, un proyecto caritativo que ya ha solicitado a Caritas Diocesana de Cuenca y que dará a conocer próximamente.