Castilla-La Mancha perdió 6.176 habitantes entre los meses de enero y julio, lo que supone el 0,30 por ciento de la población total de la comunidad autónoma, según los datos del padrón del 1 de julio que ha difundido hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Baleares, Madrid y Canarias son las comunidades en las que más creció la población en el primer semestre de 2017, y retrocedió en diez autonomías, de forma más significativa en Castilla y León, Extremadura y Asturias, mientras que Aragón perdió 359 residentes.
Así lo recoge el INE en la estadística que ha dado a conocer hoy, en la que se constata un aumento de la población residente de 21.021 personas en el primer semestre, lo que sitúa la cifra de total habitantes en 46.549.045.
Además de los mayores crecimientos, en términos relativos, de Baleares (0,84 %), Madrid (0,46 %) y Canarias (0,43%), la población también aumentó en Cataluña (0,17 %), Navarra (0,15 %), Murcia (0,07 %) y País Vasco (0,04 %).
Por contra y entre las diez autonomías que perdieron población, Castilla y León fue la más significativa, con una caída en términos relativos del 0,50 %; por delante de Extremadura, donde el retroceso fue del 0,43 % y Asturias, 0,41 %.
En cuanto las migraciones, la comunidad con mayor saldo migratorio positivo con el exterior en la primera mitad de 2017 fue Madrid (15.699 personas), seguida por Cataluña (11.467) y Canarias (9.258).
Respecto a las migraciones interiores, también la Comunidad de Madrid, con 8.737 personas, presentó el saldo migratorio más elevado, por delante de Baleares (3.989) y Cataluña (3.169).
En el sentido opuesto, Andalucía y Castilla y León registraron los saldos más negativos, con una pérdida de 7.370 personas en el primer caso y 3.714 en el segundo.
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