José María Rives aspira a presidir la Audiencia con un plan de eficiencia y mejora del servicio

En su comparecencia ante la Comisión de Calificación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) como aspirante a presidir la Audiencia conquense, Rives ha destacado que la situación es "satisfactoria" y que "gracias a la labor de la anterior presidencia, se trata de un órgano saneado, con un nivel de resolución óptimo", con una plantilla "estable y con mucha experiencia" y una "adecuada dotación de medios materiales".

En todo caso, sí ha reconocido que es necesario abordar algunas "deficiencias endémicas" que afectan a la Justicia, y también a la Audiencia de Cuenca, como la dependencia de los servicios digitales, lo que hace necesario estudiar "las necesidades y deficiencias de índole material y especialmente de tipo informático" para reclamar al Ministerio que dote de medios y personal informático necesario.

Asimismo, ha mostrado su intención de intensificar esfuerzos para evitar la suspensión de las vistas orales, para lo cual quiere promover "la revisión previa de los señalamientos próximos a fin de comprobar la ejecución positiva de todas las citaciones acordadas, y la flexibilidad y eficacia en el empleo de los mecanismos de citación previstos por la ley".

Como retos a corto plazo, ha mencionado la creacion de los tribunales de instancia y las nuevas oficinas de justicia, o el traslado de la Audiencia a los Juzgados de Cuenca, mientras se acometen las obras de acondicionamiento y mejora energética previstas en el edificio del Casco Antiguo de Cuenca.

Rives, que ostenta de manera accidental la presidencia de la Audiencia de Cuenca tras la marcha de José Eduardo Martínez Mediavilla como vocal del CGPJ, ha sido también juez decano de Hellín (Albacete) durante seis años, y ha recibido la cruz al Mérito Policial con distintivo blanco de la Policía Nacional, así como la cruz de plata de la orden al mérito de la Guardia Civil.