Misa de funeral en la ermita de San Isidro Labrador por el 40 aniversario de la muerte de Fernando Zóbel

Este miércoles 5 de junio se ha celebrado en la ermita de San Isidro Labrador una misa de funeral en recuerdo de Fernando Zóbel, en el 40 aniversario de su fallecimiento, que este año coincide con el Centenario de su nacimiento (27 agosto 1924), por lo que el pleno del Ayuntamiento de Cuenca lo declaró como “Año Zóbel”. La ceremonia fue oficiada por el sacerdote y profesor Ramón Page de Artolazábal, revestido con una casulla de raso negro y bordada, donada en 1969 por Fernando Zóbel, como hermano de San Isidro. El sacerdote evocó en la plática la figura artística y humana del pintor filipino, que tanta huella dejó en Cuenca, reconocida dando su nombre a un instituto, una calle y la estación del AVE.

“Descubrimos en la obra de Fernando Zóbel –destacó Ramón Page-- muchas obras reflejando el envolvente movimiento de momentos y lugares de dos hoces abrazando una pétrea al tiempo que natural y humana ciudad: Pequeña Primavera, Jardín seco, El Júcar, ríos, hocinos.. y tantas y tantas”.

El oficiante hizo varias interrogantes sobre esa abstracción tan suya, que nos hace escuchar el ruido del agua o el siseo del viento, el silencio, el sonido, pues “quizás su obra nos transmite el ruido de las ramas al ser mecidas por el viento, o la sinfonía de las aguas del Júcar que corren bajo la Hoz, o el lamento de las hojas que caen en el otoño. Esto no es suficiente. Eso hasta lo podemos averiguar en el silencio del atardecer conquense…”

Ramón Page resaltó que “su vida, su experiencia, su ser, hicieron que nos legara su obra…Porque todavía hoy, 40 años después de dejarnos, testigos que lo conocieron siguen asegurando que Fernando fue un “hombre bueno”. Aquí, ahora, en esta ermita, no se trata de valorar su legado artístico, reconocido una y mil veces… Aquí, ahora, en esta ermita, damos gracias a Dios por lo más importante del hombre: su corazón; en Fernando podemos definirlo como un corazón bueno. Y damos gracias a Dios por él”, concluyó Ramón Page.

Entre los asistentes al acto religioso se encontraban Manuel Fontán, director de Museos y Exposiciones de la Fundación Juan March y al tiempo director del Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca y del Museu Fundación Juan March de Palma, junto a la coordinadora, Celina Quintas, y varios familiares de Fernando Zóbel; el alcalde de la ciudad, Darío Dolz, así como concejales del Partido Popular, encabezados por la diputada nacional, Beatriz Jiménez y el diputado regional, Santiago Serrano, así como el portavoz de Vox en el Ayuntamiento. Director del IES Fernando Zóbel, Jesús Checa y profesores en activo y antiguos, así como Nicolás Mateo Sahuquillo, secretario y conservador del Museo de Arte Abstracto desde su fundación hasta 1995 y exdirector de la RACAL; presidente y secretario de la Hermandad de San Isidro, Florián Belinchón y José Vicente Ávila, respectivamente y amigos de la familia.

Finalizada la misa, los asistentes se acercaron al camposanto de Personalidades Conquenses, donde Ramón Page rezó un responso en la tumba de Fernando Zóbel, cuajada de los ramos florales que habían adornado los pies del altar.