Por un motivo u otro, la presidenta, Mari Carmen Checa, afirma que "nuestro barrio a la altura de la Calle Diego Jiménez se halla en un estado que consideramos lamentable. Por un lado, la puerta de acceso al paseo de la estación, un lugar muy transitado por los vecinos para dar paseos vespertinos a día de hoy está cerrada impidiendo su acceso; Y por el otro, la destrucción del muro de las banderas autónomas, que sin entrar en polémicas de qué es lo que más conviene a nuestro barrio y a nuestros vecinos, la situación actual de paralización de tales obras, supone un perjuicio para nuestro barrio por la estampa que deja de abandono y deterioro y lo que es aún peor, sin saber hasta cuándo se mantendrá la situación."
Es por ello que la Asociación exige una respuesta de cómo se va a proceder ante esta eventualidad, solicitando a las autoridades oportunas que informen debidamente a los vecinos de cuando y como se reanudarán las obras, y de cuando se quitarán los escombros o se llevará a cabo el arreglo de los terrenos baldíos de la Renfe.
A su vez la Asociación insiste en que parte del comienzo del barrio, a la altura de la Calle Diego Jiménez y Paseo de San Antonio, se encuentra en un estado ruinoso principalmente por la casa en ruinas que desde hace diez años ya ha sufrido peligrosos desprendimientos, sin haber hecho nada al respecto ninguna de las corporaciones que hasta la fecha han pasado por el consistorio.
A día de hoy tal edificio presenta una baranda rota y una valla amarilla sujetándola que desde hace mucho tiempo están allí sin darle ninguna solución