No importa la edad, tener habilidades y conocimientos de primeros auxilios ayuda a crear comunidades más seguras y saludables. Esto es lo que promueve y trabajan todas las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, que este año, en el marco del Día Mundial de los Primeros Auxilios (10 de septiembre) asegura que los niños y niñas, adultos o adultos mayores deben tener acceso a una educación de calidad en primeros auxilios, un compromiso de por vida con el aprendizaje y la prestación de primeros auxilios que haga una sociedad más resiliente.
Bajo el lema ‘Aprendizaje permanente de los primeros auxilios’, Cruz Roja quiere recordar que la formación en primeros auxilios debe ser accesible para todos y todas, y para ello, empodera a su voluntariado y a la sociedad en general con las habilidades necesarias para salvar vidas.
En esta línea, en su apartado de formación abierta y gratuita de su página web dispone de un curso de formación básica en primeros auxilios que ya ha sido realizado por más de 22.500 personas. Cruz Roja es líder mundial en materia de capacitación y prestación de primeros auxilios, formando anualmente a 16 millones de personas de todo el mundo en esta materia. En la provincia de Cuenca, en lo que llevamos de año, 192 personas han sido formadas gracias a los trece cursos de primeros auxilios impartidos.
“Cada vida cuenta” y “cada persona merece asistencia médica sin discriminación”, por lo que Cruz Roja quiere que la educación en primeros auxilios llegue a todas las personas sin importar las circunstancias personales o la edad, para que cada persona pueda hacer su entorno más seguro.
Así, desde una edad temprana, los niños y niñas deben aprender primeros auxilios básicos tales como gestos para pedir ayudar o el uso de los números de emergencia; en 9 de 10 casos, durante un accidente, la vida de un familiar es la que está en juego; menores desde la edad más temprana pueden brindar los primeros auxilios y salvar la vida de un familiar o compañero de escuela. Además, ellos y ellas en sí mismos se enfrentan a un alto riesgo de lesiones involuntarias, haciendo esencial para las personas que están a su alrededor tener la capacidad de responder a una situación de emergencia. A fin de prevenir accidentes domésticos, es importante incrementar la concientización de los niños y niñas para que puedan identificar amenazas potenciales en el ambiente que los rodea.
Por su parte, los adultos son quienes pueden actuar de manera activa a salvar una vida en su entorno social. Los que aprenden estas técnicas aumentan sus habilidades para ayudarse a sí mismos y para reaccionar rápida y correctamente en un accidente que involucre a un progenitor, un menor, un bebé o una persona desconocida. Ellos también deben ser más conscientes sobre medidas preventivas, especialmente cuando asisten a menores y ancianos.
En ese sentido, Cruz Roja fomenta la capacitación de adultos en primeros auxilios en bebés y menores en colaboración con empresas como Mama #AContraMarcha en Cuenca o Aique Bonito en Las Pedroñeras.
Las personas por encima de los 65 años son el grupo más vulnerable a enfermedades y accidentes domésticos. También son más propensos a caídas y a desarrollar enfermedades cardiovasculares, y otros problemas de salud como presión arterial alta y diabetes; en un mundo donde está aumentando el envejecimiento de la población, donde las personas de 65 años en adelante representarán 1 adulto de cada 6 para 2050, es crucial la formación de más personas mayores en primeros auxilios. Las personas mayores necesitan concienciarse sobre los riesgos a los que se enfrentan. La educación en la identificación temprana de señales de una emergencia y el conocimiento en primeros auxilios pueden ayudarles a reducir el sufrimiento y salvar vidas.
El Movimiento de la Cruz Roja y la Media Luna Roja está desarrollando formación en primeros auxilios inclusiva: el 19% de las Sociedades Nacionales han brindado formación en primeros auxilios específica para personas con discapacidad; el 18% de las Sociedades Nacionales han dado formación específica en primeros auxilios para personas privadas de libertad; y el 10% de las Sociedades Nacionales brindaron formación específica en primeros auxilios para personas sin hogar.
Consejos de primeros auxilios
¿Qué hacer en caso de atragantamiento en personas adultas?
Si la obstrucción es parcial, anima a toser a la persona atragantada y sobre todo no tienes que dar golpes en la espalda.
Si la obstrucción es total, que reconocerás porque la persona atragantada no puede toser, ni hablar y su piel se vuelve de color azulado, hay que:
¿Cómo afrontar la hemorragia de una herida?
Tiende a la persona accidentada con la cabeza más baja que los pies, si las lesiones que presenta se lo permiten.
Aplica compresión directa sobre el punto sangrante utilizando un apósito lo más limpio posible (gasas, pañuelo …), durante 10 minutos.
Si la herida es grande y persiste la hemorragia, busca asistencia médica y si es necesario llama al 112.
Y con una quemadura, ¿qué hacemos?
2. Mientras estás enfriando, retira las ropas afectadas, así como todos los objetos que puedan comprimir y retener calor (anillos, pulseras, relojes, …) si no están adheridos a la piel y no precisan de maniobras complicadas.