El rejoneador Diego Ventura y el diestro peruano Andrés Roca Rey, con tres orejas cada uno, salieron triunfadores del primer festejo de la Feria de San Julián de Cuenca, una tarde en la que Alejandro Talavante paseó también un trofeo.
La bautizada como Champions del Toreo dio comienzo en Cuenca con un gran ambiente en los tendidos. Afortunadamente no hubo lugar al desencanto, y los espectadores (y espectadoras) que coparon tres cuartos de plaza abandonaron el coso satisfechos por lo presenciado.
Lo de Ventura, aunque sin competir con otros rejoneadores en el cartel, fue espectacular.
Apretó de lo lindo desde el comienzo. Tremendo sobre "Nazarí", clavando y toreando tras dejar las banderillas, dando varias vueltas al ruedo completas con el de Ángel Sánchez pegado a la grupa, y con "Lío" al quiebro, si bien bajó algo con las cortas, y más tarde al matar, pinchando en dos ocasiones. Ello no fue impedimento para pasear una oreja.
En el cuarto el tono se desarrolló de menos a más, sin demasiado ajuste sobre "Fabuloso" aunque encendiendo los ánimos a continuación montado a "Gitana" y sus pares al violin al quiebro, y clavando sin cabezada sobre "Bronce". En este también pinchó, y aunque la faena fue de menor relieve que la del primero, dos orejas fueron al esportón del hispano-luso.
Talavante estuvo muy entonado en su descompuesto primero. No sólo por lo que sí hizo (llevarlo solemne y vertical por los dos pitones, incluido el malo, que fue el izquierdo) sino por lo que no hizo (dudar cuando el de Victoriano del Río sí se lo pensó probando al torero). Faena sorda que fue reconocida con una rácana ovación.
El quinto se movió aunque sin entrega por su medido fuelle. Talavante sorteó el punteo del astado la mayoría de las veces, dejando naturales aislados excelsos, y también algún banderazo. Lo cazó al segundo intento con el balance de una oreja.
Majestuoso a la verónica anduvo Roca Rey en el tercero, un toro manejable que quiso más que pudo, pero que brindó al peruano varias arrancadas de clase por el pitón izquierdo. Roca las aprovechó con esa suficiencia apabullante hasta que su oponente se vino abajo, optando por montarse encima en un arrimón que, curiosamente, fue lo que más conectó con los tendidos. Después de matar bien a la primera se le pidieron dos orejas aunque se concedió una.
No importó. Las cortaría en el sexto, un ejemplar con brío aunque sin entrega que se defendió con un molesto punteo. Con este paño en la labor de Roca Rey primaron la entrega, las cercanías y el desgarro frente a las sutilezas manejando las telas. El contundente espadazo al primer intento puso la guinda a la tarde con el peruano paseando dos orejas.
FICHA DEL FESTJO
Dos toros de los Herederos de Ángel Sánchez (primero y cuarto), y cuatro de Victoriano del Río para lidia a pie, bien presentados. Primero bravo y enclasado; segundo algo descompuesto aunque manejable por el pitón derecho; tercero noble con la fuerza justa; cuarto de menos a más; quinto y sexto con movilidad sin clase.
El rejoneador Diego Ventura: dos pinchazos y rejón entero arriba (oreja); pinchazo y rejón entero arriba (dos orejas).
Alejandro Talavante (nazareno y oro): estocada entera desprendida (ovación); pinchazo y estocada entera arriba (oreja).
Roca Rey (gris perla y oro): estocada entera arriba (oreja con petición); estocada entera arriba (dos orejas).
Álvaro de la Calle actuó como sobresaliente.
En cuadrillas, Antonio Chacón y Paco Algaba saludaron después de parear al sexto.
Incidencias: Alejandro Talavante pasó a la enfermería por un golpe recibido en la rodilla derecha al entrar a matar.
La plaza registró tres cuartos de entrada en los tendidos.
Julio César Sánchez