Este sábado se cumplen 49 años de la muerte del cantante Nino Bravo en Villarrubio (Cuenca), que falleció a consecuencia de un accidente de tráfico que sufrió en la carretera nacional N-III el 16 de abril de 1973.
El turismo en el que viajaba Nino Bravo, en compañía de su guitarrista y José Juesas Francés y del Dúo Humo, se salió de la carretera en una curva del trazado antiguo de la N-III que estaba situada a la entrada de Villarrubio, donde desde 2008 se levanta un monumento en memoria del cantante valenciano.
Nino Bravo paraba habitualmente en Villarrubio, que le ha dedicado una calle y está hermanado con Aielo de Malferit (Valencia), el pueblo natal del cantante, cuyos habitantes participaron en el homenaje que se le hizo en el municipio conquense en mayo de 2008.