Derrota de dos grandes en Cuartos de Final, donde los duelos han sido tremendamente interesantes y competidos, lo que da una idea de la calidad de los contendientes y el interés que despierta el torneo.
Julián A. Mora, que venía de realizar un partidazo en la ronda precedente, sacó a relucir esta vez una versión más ligth, pero contó con la ayuda de su oponente, Gonzalo Criado, para sacar adelante un enfrentamiento que prometía algo más. Finalmente, el “cepsero” tiró de oficio para sacar adelante el partido y encaramarse a los puesto de honor del torneo.
Ángel Crespo tampoco desperdició la ocasión que le brindó su rival de turno, René Serrano. El “chispas” ofreció una versión un tanto anodina en cuanto a su rendimiento de partidos anteriores, liderando el juego con cortas ventajas sobre “míster taichí”, quien tuvo bastantes ocasiones para nivelar la balanza, pero la escasa fortuna en unos casos y la errónea definición en otros le impidió poner en serios aprietos a su oponente, quien acabó demostrando un enorme poderío a pesar de rendir por debajo de su nivel habitual.
Duelo de titanes entre Alberto Fernández y Carlos Fernández, donde el mayor de la saga sacó adelante un partido que contó con el “beneplácito” de un Carlos visiblemente “fuera de juego”, que ayudó involuntariamente al “hermanísimo” a lograr una victoria parca en guarismos, pero merecida en actitud y definición.
Victoria sin brillo de un irregular Javier Mora, que tuvo que remar contra corriente debido al explosivo arranque de partido de Luis García. A pesar de todo, el “benemérito” supo templar y acabar mandando en un duelo muy defensivo, pero vistoso y lúcido en varias fases del mismo, frente a un “chapas” que plantó cara y nunca dio su brazo a torcer.