El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) ha publicado, coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente hoy, 5 de junio, su nuevo Protocolo para la Gestión de Residuos Sanitarios. Se trata de un documento de carácter interno, dirigido a los profesionales del sistema sanitario público regional, que cubre la ausencia, a nivel nacional o regional, de normativa legal específica sobre residuos sanitarios.
El nuevo protocolo actualiza el anterior, que databa de 2008, a través de la revisión de los grupos de clasificación, medios de contenerización, listado de enfermedades infecciosas, normas de gestión intracentro y planes de emergencia e incluye, por primera vez, recomendaciones sobre criterios ambientales a tener en cuenta en compras y contrataciones.
La Compra Pública Verde es un aspecto relevante dentro de la Estrategia de Economía Circular de Castilla-La Mancha. En este sentido, se ofrecen una serie de recomendaciones a la hora de contratar productos y servicios teniendo en cuenta la producción de residuos que lleve aparejada.
La publicación del protocolo ha sido registrada como evento en la web del Día Mundial del Medio Ambiente (https://www.worldenvironmentday.global/es) de modo que, con esta iniciativa, el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha se adhiere a la celebración promovida por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, cuyo lema este año es ‘Reimagina, Recrea, Restaura’.
Importancia de la gestión de residuos
La pandemia de la COVID-19 trajo consigo un aumento significativo de la producción de residuos sanitarios que derivó en saturación de almacenes y plantas de tratamiento e incluso en escasez de contenedores específicos, a escala nacional, poniendo de relieve la trascendencia de la gestión de los residuos sanitarios.
En el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, que ha hecho frente a la situación gracias al esfuerzo de sus profesionales y al desempeño de su gestor, la producción de residuos biosanitarios se incrementó, durante 2020, por encima de las 2.100 toneladas, con un coste de gestión superior al millón de euros.
Estas cifras reflejan la entidad de la producción de residuos sanitarios, así como la importancia de minimizar su generación y de gestionar adecuadamente sus distintas clases, objetivos a los que se espera contribuya el nuevo protocolo publicado.