La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias (IIPP) ha remitido este jueves a los centros penitenciarios un escrito que supone la llegada de la nueva normalidad a las prisiones dependientes de la Administración General del Estado.
Tres meses después de que comenzaran a cerrarse al exterior, el regreso progresivo a la situación anterior a la COVID-19 culmina este jueves con la vuelta progresiva de las comunicaciones íntimas, familiares y de convivencia, y con el fin de la obligatoriedad de las cuarentenas para todos los internos e internas al ingreso o reingreso en centro penitenciario.
En general, serán de aplicación las mismas indicaciones sanitarias y las mismas obligaciones que tiene la población en general: uso de mascarillas, distancia de seguridad, desinfección de superficies, el lavado de manos o evitar acudir al centro penitenciario si se presentan síntomas. Con carácter particular:
Comunicaciones íntimas, familiares y de convivencia
Ingresos o reingresos en centro penitenciario
84 casos, 76 de ellos ya curados
Instituciones Penitenciarias comenzó a cerrar las prisiones con la suspensión de todas las comunicaciones que no fueran por locutorio y la prohibición de entrada a todo el personal no penitenciario. Con la entrada en vigor del estado de alarma, se suspendieron también las comunicaciones ordinarias y los permisos a los que tienen derecho las personas privadas de libertad.
Estas medidas, muy severas para la población penitenciaria, se compensaron con otras como la ampliación de las llamadas a las que tienen derecho internos e internas, gratuitas para las personas sin recursos, o la introducción de las videollamadas.
Decisiones que, sumadas a la labor didáctica de los equipos directivos, de Tratamiento y de los funcionarios de Vigilancia, dieron como resultado la práctica ausencia de incidentes graves relacionados con la pandemia y una afectación por COVID cuatro veces inferior a la de la población en general.
Hasta la fecha solo se han registrado 84 casos entre las cerca de 50.000 personas que custodia la Administración Penitenciaria. De ellas, 76 ya han recibido el alta médica definitiva.