Durante la época del verano existen diferentes opciones para refrescarse. Las costas de España ofrecen un gran número de lugares mágicos, sin embargo, las piscinas públicas o privadas son la solución al calor más popular. No obstante, nuestro país no solo cuenta con estas opciones, y es que las piscinas naturales son un atractivo turístico poco conocido pero realmente eficaz.
Las piscinas naturales, también llamadas biopiscinas o piscinas naturalizadas, son zonas con cierta profundidad que almacenan grandes cantidades de agua. Ahora bien, ¿es seguro acudir a este tipo de recintos?
Por lo general, se considera que las piscinas enterradas o de obra, es decir, las que tradicionalmente conocemos, son más higiénicas. Y es que en este tipo de piletas es posible regular el valor del pH del agua, ya que se aplican elementos químicos como el cloro o la sal. Además, para facilitar su mantenimiento, se utilizan una serie de aparatos como las depuradoras que purifican el agua y los filtros de arena que retienen partículas no deseadas en el interior.
Sin embargo, aunque no es de conocimiento popular, las biopiscinas también cuentan con sistemas de depuración. A través de la vegetación oxigenan y eliminan nutrientes que propician la aparición de algas y otros microorganismos no deseables. Este mecanismo de purificación natural brinda diferentes ventajas, debido a que al no utilizar sustancias adicionales no propicia la irritación en los ojos ni maltrata el cabello.
A continuación, conoceremos tres de las piscinas naturalizadas que no te puedes perder:
Están localizadas a 15 km de Benidorm y a 3 km del centro urbano de Callosa d'en Sarrià y constituyen un paraje natural con un alto grado de conservación de la riqueza ecológica. El lugar está dotado de servicios turísticos y ejemplar educación medioambiental. A lo largo del cauce del río Algar, se pueden disfrutar espectaculares creaciones naturales: cascadas, fuentes manantiales, remansos de agua en donde se pueden tomar refrescantes baños en aguas cristalinas, el imponente canal y las acequias centenarias todavía hoy en uso. El espacio también cuenta con una zona de picnic, un camping de 2ª categoría, cinco restaurantes donde es posible degustar la gastronomía típica de la zona y Dinopark Algar, un parque educativo en el que se encuentran modelos robóticos y estáticos de dinosaurios en un entorno natural.
Las Chorreras del Cabriel es un increíble paraje natural de la provincia de Cuenca, situado entre los pueblos de Enguídanos y Villora, que fue declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 2019. Ofrece a los visitantes una zona de saltos, cascadas y pozas de agua turquesa, donde se realiza senderismo, turismo de naturaleza, observación de aves y deportes acuáticos (el interés por el piragüismo está creciendo en la región).
Las Chorreras del Cabriel es un sitio natural vivo que sigue formando "tobas" y dónde se evidencia que Cuenca tiene una flora y fauna única. Además, cada año se organiza el evento deportivo "Trail Chorreras del Cabriel", una carrera de montaña que recorre las zonas naturales de Enguídanos y Villora a través de 24km.
Está claro que, con este tipo de atracciones y el desarrollo de deportes que congreguen gran número de entusiastas, Cuenca podría ubicarse en el top de los destinos turísticos más visitados en España.
Se trata de un territorio montañoso con gran riqueza paisajística en las inmediaciones del Parque Natural de la Sierra de Espadán, ubicado en la comarca del Alto Mijares, en el interior de la provincia de Castellón. Visitar esta Villa Termal involucra más que hacer turismo rural. Es una oportunidad para disfrutar del tiempo libre en un entorno ligado a la naturaleza, la salud, la tradición, el descanso, el deporte, la cultura, la gastronomía y el ocio. En Villa Termal se pueden disfrutar agradables paseos por la vereda de los ríos, el baño en las piscinas y los descansos en las fuentes naturales. Los espléndidos miradores desde los numerosos rincones y atalayas hacen que el visitante se relaje y perciba cómo se han ido formando los magníficos paisajes de Montanejos a través de los años.