“Nuestra actual Semana de Pasión se encuentra en un punto álgido, muy álgido. Por ello, debemos consolidar durante los próximos años lo que hasta ahora se ha construido. Y debemos hacerlo con la seriedad, la devoción y la humildad que nos son propias”. Con estas palabras iniciaba el presidente de la Junta de Cofradías, Jorge Sánchez Albendea, su alocución ante la Junta General de la institución nazarena en la tarde de este martes, 9 de abril.
La sede permanente de la JdC acogía la última reunión de la asamblea nazarena antes de la celebración de la Semana Santa de 2019, reunión a la que asistían – como es habitual – el alcalde de la ciudad, Ángel Mariscal; el obispo de la Diócesis, monseñor José María Yanguas; y el concejal responsable del Área de Semana Santa, Pedro J. García Hidalgo.
En su intervención, Sánchez Albendea llamaba a los nazarenos a “no perder la verdadera razón de esta conmemoración ancestral, que no es otra que nuestra condición de cristianos. Y eso significa mucho, pues marca nuestra comportamiento y nuestra forma de ser” aseveraba. El presidente de la JdC recordaba que “tenemos la obligación de trabajar en favor del bien común” y recalcaba la necesidad e importancia de “ver la Semana Santa como un todo, como un conjunto en el que todas sus piezas son igual de importantes” porque “si cualquiera de nuestras Hermandades o desfiles procesionales no está a la altura, todos perdemos”. El presidente pedía a los nazarenos no limitarse “a vuestra Hermandad, a mi recorrido procesional, pues somos lo que somos por nuestra representación cronológica, por nuestra homogeneidad, porque hombro con hombro caminamos juntos en pie de fraterna igualdad”.
El presidente tenía también palabras de recuerdo para el primer desfile del Duelo, que tuvo lugar en 2018, y pedía a sus hermanos que cuiden “el sentido con el que ha nacido. Luchad por consolidar la Procesión del Duelo. Que el tiempo no desvirtúe lo que tanto ha costado que viese la luz”. Sánchez Albendea dedicó una parte de su discurso a reconocer el entendimiento entre las hermandades del Perdón para aprobar el adelanto de una hora en la salida, así como entre las de Camino del Calvario, para que la decisión de tomar el recorrido corto en 2018 se desarrollara con total normalidad. En este punto, habló de una de las tareas que la Junta de Cofradías tiene para la próxima etapa: “Ha llegado la hora de acometer de manera definitiva el mecanismo jurídico que permita a las Turbas de Cuenca dotarlas de una regulación que les haga participar de una manera activa en el seno de la Junta de Cofradías. Tal vez no se tendría que haber llegado a donde hoy estamos pero como volver atrás es imposible tenemos la obligación de acometer en los próximos meses este asunto y lo haremos como siempre, desde la tranquilidad, desde la reflexión y el debate constructivo y desde la responsabilidad con la que siempre se han tratado los asuntos en el seno de la Junta de Cofradías”.
Entre otras cuestiones, el presidente habló del esfuerzo y apuesta de la JdC por promocionar la Semana Santa fuera de Cuenca, del crecimiento de las actividades para los más pequeños y la necesidad de inculcarles los valores que se han ido transmitiendo de generación en generación. “La Semana Santa en Cuenca nos une a todos, es el único momento en el que caminamos, unos tras otros, bajo el anonimato del capuz sin importarnos otra cosa que no sea conmemorar el inmenso legado que nuestros padres y abuelos construyeron con tan gran acierto” expresó. Sánchez Albendea agradeció la implicación y colaboración de las instituciones y los medios de comunicación en el desarrollo y difusión de la Semana Santa, antes de concluir pidiendo a los nazarenos que se revistan de hábito penitencial para vivir la Semana de Pasión y que velen por cuidar la uniformidad, las buenas formas y el respeto “en el que hemos sido educados”.
Palabras del alcalde y del obispo
El alcalde de la ciudad, Ángel Mariscal, aseveró en su intervención que “la Semana Santa es un acto cultural de primer nivel y su celebración ayuda también a la renovación y mejora de las infraestructuras de la ciudad”, en relación a las obras y trabajos de limpieza que el Ayuntamiento despliega cada año para contribuir al embellecimiento del recorrido procesional. Mariscal hizo un balance en el que tuvo palabras para todas las formas de colaboración que el Consistorio pone al alcance de la Semana Santa y la Junta de Cofradías, y quiso valorar además el trabajo que desde las hermandades y la JdC se hace con los más pequeños para difundir entre ellos la Semana Santa.
Por su parte el obispo de la Diócesis, monseñor José María Yanguas, quiso valorar positivamente “la mejoría que se advierte en estos años en los desfiles procesionales, en pequeños detalles”. Para monseñor “la sencillez con la que surgen las cosas es su belleza y Jorge tiene razón en que hay que cuidarlo”. Además, llamó a los nazarenos a practicar la cultura del acuerdo: “Todo lo que sea cultivar, promover y alentar la cultura del acuerdo y del convenio, siempre es bueno. Concordar voluntades, llegar a acuerdos, hacer convenir a las personas discrepantes es útil para la vida de la Semana Santa de Cuenca. Por eso, os animo a llegar a acuerdos en el seno de las hermandades y de la Junta de Cofradías. A ceder para aunar esfuerzos y que ganemos todos” recalcó.
Monseñor Yanguas concluyó recordando a los presentes que “la Semana Santa de Cuenca es para todo el que viene y ojalá venga mucha gente a contemplarla y a sentirla. Pero también vividla vosotros. Mirad aquello de lo que sois herederos. Sobre todo, miraos a vosotros. Quienes vengan, no la van a vivir como vosotros. Que prevalezca esa vivencia de los conquenses”.
La Junta General finalizó con la presentación, por segundo año consecutivo, de la campaña de concienciación para el buen desarrollo de la Semana Santa. La comunidad nazarena espera ya el Pregón del cardenal Carlos Amigo este Viernes de Dolores, con el que se abre la Pasión de 2019.