Con los desfiles de Piñata que este domingo se celebran en Ciudad Real y en Miguelturra se pone el punto y final a los carnavales que desde el pasado 2 de marzo se han celebrado en gran parte de los municipios de Castilla-La Mancha y que atraen a cientos de turistas de todo el país.
En estos momentos en la región hay nueve municipios cuyos carnavales cuentan con declaración de fiesta de Interés Turístico Regional, y además tres de ellos tienen también el reconocimiento estatal de fiesta de Interés Turístico Nacional. Es el caso de Herencia y Miguelturra en la provincia de Ciudad Real, y el carnaval de Villarrobledo, en Albacete.
El carnaval de Herencia tiene un gran sentido para las personas de esta localidad, pues simboliza su mejor fiesta en todo el largo año. ‘El Perlé’ es el elemento que dota al carnaval de Herencia de una identidad propia. Es una representación burlesca del orden establecido. ‘El Perlé’ se reconoce porque lleva un atuendo parecido a un pijama a rayas blancas y azules y gorro de dormir de los mismos colores.
Junto a Herencia, Miguelturra es una de las localidades de referencia del carnaval de Castilla-La Mancha. Miguelturra lleva la ‘máscara callejera’ como signo de identidad de sus carnavales. Un disfraz tradicional con un trapo en la cara, y ropones viejos, que aún se ve por sus calles, y que fue mantenido durante siglos por los vecinos, haciéndolo llegar a nuestros días. Provocadores, y ocultos en su disfraz, se muestran satíricos con propios y ajenos. El ambiente general es de fiesta y alegría.
El carnaval de Villarrobledo, en la provincia de Albacete, se caracteriza porque es muy popular y participativo y tiene muchas particularidades como el ‘Rastrillo de Carnaval’, la ‘Noche del Orgullo Manchego’ o el ‘Concurso de Bodas’ que lo hacen único. Durante más de una semana, todo en Villarrobledo es carnaval. Desde la gente que sale disfrazada a las calles, a los dependientes y camareros de los establecimientos.
Junto a estos carnavales, de gran relevancia, son también conocidos, y reconocidos, los que se celebran en La Roda o en Tarazona de La Mancha en la provincia de Albacete; Almadén, Ciudad Real, Malagón y Villafranca de los Caballeros en la provincia de Ciudad Real; los de Luzón, que cuentan con la declaración de Bien de Interés Turístico Regional, en la provincia de Guadalajara, o el antiquísimo ‘Carnaval de Ánimas’ que se celebra en Almorox, en la provincia de Toledo.