El presidente del Gobierno regional, Emiliano García-Page, ha asegurado que “en esta tierra tenemos claro que Castilla-La Mancha está por delante de los intereses de los partidos y que España está por delante de Castilla-La Mancha y del resto de las comunidades autónomas”.
Durante el acto institucional con motivo del XL aniversario de la Constitución Española de 1978, que se ha celebrado este jueves en la Iglesia Paraninfo ‘San Pedro Mártir’ de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), en Toledo, el presidente regional ha alabado el papel que la Carta Magna y el Estado de las Autonomías han jugado en el proceso de modernización y desarrollo tanto de España como de Castilla-La Mancha, al mismo tiempo que ha advertido sobre las “amenazas” que el contexto político actual suponen para ambas.
Un “intento de atropello a la Constitución” y al autonomismo, ha recalcado García-Page, ante el que “nunca estaremos cruzados de brazos” desde Castilla-La Mancha. En este sentido, el presidente García-Page ha revindicado el papel de región en el contexto nacional, subrayando que Castilla-La Mancha “tiene tanta voz como el resto” y que el Gobierno regional se encargará de proteger “que no vaya a haber dos regiones con privilegios a costa del problema de las demás” o que “se impidan o cercenen los derechos de los ciudadanos de Castilla-La Mancha” a través de legislaciones que favorezcan ninguna lengua “que aquí no se estudia”.
Al respecto, ha subrayado que “nadie puede hablar de libertad o pluralidad como coartada para tener privilegios”; algo que, ha lamentado, está ocurriendo con el independentismo catalán y que en realidad esconde la aspiración de alcanzar mayores cuotas “de reparto financiero o competencias” y, por ende, “también hablan de las nuestras”. Así, el presidente de Castilla-La Mancha ha recordado a los independentistas catalanes que el actual período democrático se caracteriza precisamente por ser el de mayor “libertad cultural” de la historia de España. “Tenemos muy claro de qué va la cosa”, ha sentenciado.
Por el contrario, ha asegurado García-Page, los castellano-manchegos “somos parte del Estado, nos reconocemos en la Constitución y, además, ponemos por delante al país por encima de nuestros intereses”.
“Esta región representa una forma de entender el país y una forma de consagrar el artículo catorce de la Constitución, que habla, con contundencia, de que lo que pase en España incumbe a todos los españoles y españolas”, ha abundado el presidente regional, quien también ha explicado que en Castilla-La Mancha “no queremos ser más pero tampoco ser menos”.
En este contexto, ha advertido de la “tentación, ahora o en el futuro”, que supondría el “enfrentamiento dual” del que precisamente protege la Carta Magna; una pretensión de “dividir el país en dos mitades” que sería “extremadamente negativa” y a la que “pone coto” la Constitución de 1978, gracias al consenso alcanzado entre la ciudadanía y los propios autores del texto.
Ante la posibilidad de reforma
El presidente de Castilla-La Mancha, ante la posibilidad de una reforma constitucional, ha hecho hincapié en que “una cosa es que se pueda matizar y otra dar cuartos al pregonero” o “a quienes quieren acabar con ella”.
García-Page ha asegurado que la Constitución Española de 1978 “está hecha de un material” que incluso da cobijo “a quienes la atacan”, al mismo tiempo que ha alertado sobre una situación de “disenso institucional” que “se traduciría en miseria económica, social y más desigualdad”.
En este sentido, ha rechazado la posibilidad de “trocear la soberanía nacional” y ha reclamado el papel de “todos los españoles y las españolas” a la hora de tomar decisiones que “incumben a todos”, censurando asimismo la legitimidad de “ningún gobierno” para “mercadear con los derechos de todos”; algo que, ha celebrado, “las principales fuerzas políticas tienen claro”.
“No podemos tocar la Constitución Española bajo ningún tipo de chantaje o amenaza”, ha recalcado García-Page, para quien cualquier modificación del texto no podría ser factible si no es gracias a “un gran consenso” y siempre que estas no derivaran “de ningún tipo de amenaza, ultimátum o chantaje”.
Principales logros de la Constitución de 1978
Por otro lado, el presidente del Ejecutivo castellano-manchego ha repasado algunos de los logros cosechados por España y Castilla-La Mancha desde la aprobación de la Constitución de 1978. Entre estos, el haber puesto las bases para la entrada en la Unión Europea, o las cotas alcanzadas en materias como la Sanidad, la Educación, la Dependencia y los Servicios Sociales.
En la misma línea, ha defendido, como uno de los “grandes inventos de la Constitución”, el reparto de poder a través de la “pluralidad territorial” de las autonomías, “lo que nos ha permitido avanzar como nadie hubiera imaginado hace cuarenta años”.
El aumento del número de turistas, así como la vertebración de España y de Castilla-La Mancha a través del ferrocarril de alta velocidad o de la red de autovías y autopistas, o las cotas de seguridad ciudadanas que caracterizan al país y a la región, han sido otros de los logros destacados por García-Page.
Asimismo, ha subrayado la importancia de la creación de la clase media, tanto en “términos sociales, económicos y políticos”, el aumento de la esperanza de vida, la universalización de la Sanidad y la Educación públicas o el sistema de pensiones, “que hay que protegerlo, aunque haya que actualizarlo y mejorarlo”.
“Estos han sido con diferencia los mejores cuarenta años, que los hemos gestionado en libertad y entre todas y todos”, ha enfatizado el presidente de Castilla-La Mancha, quien ha asegurado que la de 1978 “es una Constitución muy incluyente, hecha de una aleación que nos permite mantener su firmeza sin que ello signifique que sea frontal”.