Jesús de la Osa (Presidente de la Plaza de Toros de Villar de Olalla): "Aitor se ha quedado muy mermado a raíz de la cogida del primer novillo, y en su segundo teniendo en cuenta esta circunstancia, todo lo que ha hecho es digno de agradecer".
"Los novillos no han tenido el comportamiento que todos esperábamos. Se esperaba más".
"En líneas generales, los novilleros se han entregado y teniendo en cuenta que no torean todo lo que desearían han tenido una digna actuación".
Por último, le preguntamos al Presidente: ¿Qué significa para Villar de Olalla y sus habitantes este festejo anual?
Jesús de la Osa: "Un pueblo sin la Fiesta de los Toros muere".
"Afortunadamente en este pueblo no tenemos este problema porque exceptuando una minoría, el resto de la población defiende la Fiesta de los Toros".
"Antes de entrar en materia en cuanto a la valoración del festival de hoy, me gustaría destacar la expectación que se genera año tras año en Villar de Olalla. Solo hay que ver el aspecto que presenta la Plaza de Toros con unos tendidos nutridos de numerosos aficionados y simpatizantes a la Fiesta de los Toros. El motivo radica en dos factores muy determinantes: la cercanía con la capital conquense y este año se le ha sumado el aliciente de ver a dos novilleros conquenses como son Sergio López y Aitor Darío "El Gallo", donde no olvidemos que este último ha hecho el paseíllo hasta en tres ocasiones en la Monumental Plaza de Las Ventas de Madrid, cortando un apéndice en una de ellas".
"En cuanto a la novillada la podemos catalogar como muy dura y difícil, novillos muy complicados que al final ha sido imposible triunfar con ellos. Son novillos con mucho sentido, desarrollan mucho sentido si no se les hace las cosas bien desde un principio, y luego no hay forma de darles un pase".
"El festejo como tal no ha tenido ningún lucimiento puesto que ninguno de los cuatro novillos se ha prestado para conseguir el triunfo. Los novilleros, tanto Sergio como Aitor le han puesto muchas ganas".