El Gobierno de Castilla-La Mancha se plantea como uno de sus retos lograr incrementar la confianza en la nueva economía digital trabajando en tres vertientes: en la población, en el tejido empresarial y en las administraciones públicas. Así lo ha indicado esta mañana la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, en el marco de un desayuno de trabajo organizado por el Grupo de la Alianza Progresista de los Socialistas y Demócratas en el parlamento Europeo, que se ha celebrado en Toledo, y que ha contado con la presencia del portavoz de la delegación socialista española en el Parlamento Europeo, Ramón Jáuregui y del eurodiputado Sergio Gutiérrez.
En este contexto, la consejera ha destacado la importancia de contribuir a la digitalización de la economía y de la sociedad a través de la formación y la cualificación del capital humano en las nuevas competencias demandadas por el mercado de trabajo. Así, ha recordado que desde el Gobierno autonómico se han invertido más de 5,2 millones de euros en el desarrollo de más de 150 acciones de formación dirigidas a más de 2.300 personas desempleadas y ocupadas en la familia profesional de informática y comunicaciones.
En la misma línea, ha considerado fundamental que la reactivación de la economía a la que asistimos, y el nuevo paradigma de la economía digital, llegue por igual a todos los rincones de la región. “La economía digital nos brinda una oportunidad única de crecer, ofreciéndonos grandes posibilidades de reducir desigualdades entre los ciudadanos y los territorios, pero al mismo tiempo plantea retos que debemos saber afrontar si queremos seguir siendo competitivos en el mercado global”, ha subrayado.
Más de un 78% de los hogares de Castilla-La Mancha tiene acceso efectivo a la red, un porcentaje que ha crecido casi 40 puntos desde el comienzo de la crisis. En este escenario, “la reducción de la brecha digital territorial es un factor fundamental para garantizar el acceso de la ciudadanía a los contenidos y servicios que desean a un precio competitivo, y de estímulo de la actividad económica y la creación de empleo al mismo tiempo”, ha aseverado la consejera.
En alusión al tejido empresarial en la Comunidad Autónoma, ha indicado que las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) son el núcleo de la sociedad digital y que gracias al potencial que presentan para contribuir de forma extraordinaria al crecimiento y el empleo, en la Estrategia de Especialización Inteligente de Castilla-La Mancha hasta 2020, son un factor transversal a potenciar para lograr el desarrollo de los sectores prioritarios.
El 94,7% de las empresas de diez o más empleados de la región tiene conexión a internet. Un porcentaje que baja al 60% si se trata de empresas de menos de menos de diez empleados. “Nuestras pymes, que son más del 95% de nuestro tejido empresarial, deben tener presente que el comercio on-line no está reservado a las grandes empresas”, ha matizado.
Del mismo modo, ha recordado que desde el Gobierno de Castilla-La Mancha, se apuesta por la incorporación de las empresas a la economía digital en el marco del Plan Adelante potenciando el comercio electrónico entre las pymes, de cara a impulsar nuevos canales de venta que las posicionen estratégicamente en el mercado online y el apoyo a la transformación digital de la industria manufacturera, mediante la incorporación a sus procesos de producción de las tecnologías de la electrónica, la información y las comunicaciones.
En cuanto a las administraciones públicas, la consejera ha aseverado por último que el Ejecutivo debe dar ejemplo y facilitar trámites mediante la incorporación telemática a todas las líneas de actividad.