La Unidad de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital “Virgen de la Luz” de Cuenca, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, ha realizado la primera intervención quirúrgica con cirugía endovascular para la implantación a un paciente conquense de una endoprótesis en un aneurisma de aorta abdominal-infrarenal.
Las facultativos que integran este Servicio hospitalario siguen avanzando en la realización de cirugías aorticas complejas, después de que en agosto del pasado año realizaran la primera intervención de este tipo que se llevaba a cabo en el Hospital “Virgen de la Luz” para la colocación de una endoprótesis de aorta torácica con oclusión de arteria subclavia.
Estas intervenciones suponen una notable mejora en la cartera de servicios del Hospital de Cuenca, lo que está permitiendo que ningún paciente tenga que ser derivado a otros centros hospitalarios salvo en casos de muy alta complejidad, y todo gracias al arco radioquirúrgico con el que el Gobierno de Castilla-La Mancha dotó al Hospital Virgen de la Luz en el mes de noviembre de 2016.
Radiología intervencionista
Se trata de un aparataje fundamental para el control radiológico del procedimiento durante la intervención, una cirugía en la que participan no solo los facultativos especialistas en Angiología y Cirugía Vascular, sino también el Servicio de Radiología del Hospital conquense con la participación los radiólogos intervencionistas que colaboran en todo el procedimiento para la colocación de la prótesis, que se realiza mediante una técnica mínimamente invasiva.
Además, también se cuenta con la colaboración del Servicio de Anestesia y de la Unidad de Cuidados Intensivos, para el control posoperatorio de los pacientes.
El tratamiento endovascular de los aneurismas resulta mucho más ventajoso para los pacientes afectados ya que disminuye enormemente la morbilidad y la mortalidad, la cirugía es mínimamente invasiva, reduce los riesgos quirúrgicos y la recuperación de los enfermos es mucho más rápida.
Más actividad
La Unidad de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital de Cuenca se creó en el año 2010. Durante el pasado año registraron 1.200 primeras consultas, doscientas más que el año anterior, de las cuales un 70 por ciento fueron de alta resolución, lo que significa que en el mismo acto se le realizan las pruebas al paciente y puede salir de la consulta con su diagnóstico y su tratamiento e incluso con la planificación quirúrgica, si es necesario.
De hecho, durante el año 2016 se realizaron un total de 2.500 pruebas en las consultas de Angiología y Cirugía Vascular, 300 más que en 2015. Además, también se contabilizan las 208 interconsultas en el Servicio de Urgencias.
De igual forma han incrementado las cifras en cuanto a cirugías ambulatorias, 258 el pasado año frente a las 144 del año 2015, además de las 360 intervenciones quirúrgicas, de las cuales 20 fueron de carácter urgente.
También ha aumentado la actividad en lo que se refiere a incremento de procedimientos endovasculares mínimamente invasivos, que se realizan en colaboración con el Servicio de Radiología y que este año han superado los 120.
Además, todos los pacientes conquenses que dependen del Área de Salud de Alcázar de San Juan, acuden al Hospital de Cuenca para sus tratamientos y se colabora estrechamente con el Servicio de Nefrología de aquel hospital para el diagnóstico y realización de los accesos vasculares y cuidado y tratamiento de las complicaciones de las fístulas.
Las cirujanas que se integran en la Unidad de Angiología y Cirugía Vascular del “Virgen de la Luz” realizan cirugía aórtica incluyendo aneurismas yuxtarenales y cirugía carotídea, y tratan toda la patología arterial así como la patología venosa, tratamientos endovasculares de troncos viscerales y por último, han incorporado la cirugía endovascular aórtica a su cartera de servicios.
Realizan intervenciones quirúrgicas dos días a la semana e incluso tres días dependiendo de la demanda; atienden cuatro consultas semanales y colaboran con el Servicio de Radiología Intervencionista para la realización de los procedimientos de miembros inferiores que no requieren quirófano.
Además, como las urgencias vasculares postoperatorias de las cirugías arteriales pueden ser bastantes graves, las facultativos que se integran en esta Unidad están siempre localizadas hasta que el paciente se encuentra estable en planta de hospitalización.