Cuatro familias de Villarrubio (Cuenca) han denunciado que llevan desde el 30 de noviembre sin suministro eléctrico, y acusan al alcalde de la localidad de habérselo cortado para presionarles y que sufraguen la construcción de un centro transformador.
Por su parte, el alcalde, Antonio Flores, ha negado esas acusaciones y ha defendido que el Ayuntamiento ha ayudado durante varios años a estas familias únicamente por un "bien social".
Las familias sostienen que están en pleno casco urbano y quieren que el Ayuntamiento les conecte al suministro eléctrico, y han presentado una demanda contra el alcalde que posteriormente han ampliado al constructor y otras personas implicadas en la construcción de las viviendas, por haber autorizado la ocupación de las viviendas sin contar con todos los suministros necesarios.
Uno de los residentes en estas viviendas, Iván Bellot, ha relatado que se mudaron a estos nuevos unifamiliares en el año 2008, y entonces el constructor, que no había urbanizado ni levantado el centro de transformación, estuvo provisionalmente suministrándoles luz mediante un contador de obra.
Sin embargo, en 2012 seguían en esa situación provisional y cuando el constructor dejó de pagar, sufrieron un primer corte de luz, tras el cual negociaron con el alcalde "engancharse" al alumbrado público y pagar su consumo al Ayuntamiento, algo que han estado haciendo desde entonces, según asegura.
Durante este tiempo, ha explicado Bellot, la única solución que les ha ofrecido el regidor ha sido que estas cuatro familias sufraguen el centro de transformación, algo a lo que ellos se negaron porque no consideran que tengan que pagar una instalación que puede ser usada por todo el pueblo, cuando además otras personas, entre ellas el alcalde, tienen propiedades que utilizarían dicho centro.
Estas familias sostienen que entonces el alcalde dejó de pasar lectura de los contadores "para así poder alegar ante los vecinos que no pagábamos la luz", y ante esta situación decidieron, el pasado verano, presentar una demanda contra él por haber autorizado la construcción en unos terrenos de su propiedad sin contar con todos los suministros necesarios.
Bellot ha resaltado que llevan un mes y medio en el que cuatro familias, con niños pequeños, han pasado las fiestas navideñas sin luz, y compartiendo entre los vecinos un pequeño generador, que permita "encender a ratos la nevera, o que se cargue el agua caliente".
El alcalde, Antonio Flores, afirma por el contrario que, cuando estas familias sufrieron el primer corte de luz, el Ayuntamiento accedió a que se enganchasen al alumbrado público únicamente "por un bien social, para que no estuvieran sin luz".
Sin embargo, sostiene que el pasado verano el consistorio "se encontró con una denuncia" en la que los vecinos decían que el Ayuntamiento no era una empresa eléctrica y no podía cobrarles; así que, siguiendo instrucciones del juzgado cuando fue a declarar, el regidor explica que el Ayuntamiento convocó un pleno y se procedió a cortar la luz.
El alcalde defiende que desde un principio sólo han intentado ayudar a estas familias, y considera que ellas le han correspondido "poniendo pancartas e insultando a él y a su familia, y les exige que se disculpen. EFE