Un belén tradicional conquense, confeccionado a partir de figuras que han ido prestando hermanos y personas allegadas a la Hermandad. Así se une este año a la Ruta de los Belenes la V. H. de Jesús entrando en Jerusalén y Nuestra Señora de la Esperanza, con un nacimiento que se podrá visitar en su sede del 16 de diciembre al 6 de enero de 2017 y en el que, aseguran, “habrá sorpresas”.
El belén, en el que han trabajado varios miembros de la Junta Directiva de la Hermandad y cuyo montaje comenzó en la segunda semana de noviembre, está ubicado en la nueva sede de la Borriquilla y “ocupa una habitación completa de unos 10 metros cuadrados” explican desde la Hermandad. En él, los visitantes encontrarán “escenas típicas de la Serranía y de los montes de Cuenca, así como escenas tradicionales”.
Desde la Hermandad explican que el montaje del belén ha contado con la colaboración especial de dos hermanos, Rafael Redondo y Rubén Gascueña, a quienes han querido agradecer su trabajo y dedicación, así como a todas las personas que han aportado algo para el mismo “y que han sido muchas”. Se trata de un belén especial, ya que “lo hemos hecho con los pocos medios que tenemos y con la mejor voluntad, mucho cariño y humildad, puesto que la única experiencia en poner belenes que tienen quienes han trabajado en él es la del belén familiar”.
La Hermandad, que se ha sumado a la iniciativa solidaria de recaudación de fondos contra el cáncer infantil puesta en marcha por el Resucitado, tiene dos objetivos con su belén. Por un lado “acercar la sede a los hermanos” y, por otro, “seguir colaborando con la Junta de Cofradías y los proyectos que pone en marcha”.
Desde la Borriquilla invitan a todos los conquenses a pasarse por su belén y disfrutar de escenas típicas y entrañables momentos navideños. Ya queda menos para poder visitarlo.