El alcalde del municipio conquense de Yémeda, Manuel Martínez, ha lamentado profundamente el último “ataque sin sentido ni justificación” que el diputado nacional del PSOE, Luis Carlos Sahuquillo, ha vertido contra su municipio y el proyecto en el que se está trabajando para que pueda recuperarse el balneario de la localidad.
“Es incomprensible que los socialistas sigan atacando cualquier oportunidad que tenemos en la provincia de Cuenca de generar riqueza y puestos de trabajo”, afirmaba el primer edil de Yémeda. Es por ello, que el alcalde propondrá al pleno que Sahuquillo sea declarado ‘persona non grata’ en su pueblo, “los vecinos de Yémeda y los de esta comarca tienen el mismo derecho a trabajar y a contar con infraestructuras que los de cualquier otra parte”, afirmaba Martínez.
Esta “inquina y obsesión continua” del PSOE contra Yémeda, es, a juicio del alcalde, producto del profundo desconocimiento y falta de conexión de los dirigentes socialistas con nuestra provincia y sus pueblos, “Sahuquillo debería preocuparse por trabajar por esta tierra y por quienes vivimos en ella. También tendría que plantearse qué falla entre los cargos públicos que representan a los votantes socialistas de la provincia, que cada vez les votan menos, tal y como ha quedado patente en las últimas elecciones”, añadía Manuel Martínez.
Y es que el mundo rural y la apuesta por su mantenimiento y desarrollo es una cuestión que al PSOE le viene grande, según opina el primer edil de Yémeda. “Les dan igual los pueblos, sobre todo si son pequeños, y la gente que vivimos en ellos, pero se les llena la boca al hablar de lucha contra la despoblación. ¿Saben Sahuquillo y los socialistas el alcance de este problema? Las reuniones y los viajes han de materializarse en medidas, no sólo en pasearse”, afirma Martínez.
Para finalizar, el alcalde de Yémeda considera lamentable y nada ético que el socialista Sahuquillo aproveche para realizar declaraciones públicas cualquier oportunidad, aunque sea un lamentable accidente, lo que “demuestra que no tiene escrúpulos ni argumento alguno, que mezcla sin ton ni son las realidades de nuestra provincia y que sólo busca, de la manera más burda, revalorizarse políticamente y justificar sus idas y venidas a Madrid”, concluía.