El portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Cuenca, Pedro J. García Hidalgo ha denunciado hoy que el alcalde Juan Ávila ha adjudicado a dedo la compra del área infantil instalada en la calle Carretería, por tratarse de un importe superior al que establece la normativa para adjudicaciones directas. Se trata, según el portavoz de un incumplimiento flagrante pues este límite está en 18.000 euros para suministros y la factura de los columpios supera los 45.000 euros.
García Hidalgo ha explicado que Ávila ha intentado enmascarar esta irregularidad haciendo pasar esta instalación por una obra, ya que el importe máximo en esos casos asciende a 60.000 euros. Según el PP, en la factura puede verse claramente que la instalación sólo supone 1.800 euros de la cuantía total. Si fuese una obra debería llevar consigo una memoria y un proyecto, así como un informe de supervisión del técnico correspondiente. Algo que ha dicho, pedirán.
Los populares consideran que se trata de una nueva tropelía de Ávila, que pretende saltarse la legalidad una vez más, sin ofrecer la posibilidad de que cualquier empresa interesada pudiera presentar su oferta e impidiendo que la competencia abarate el precio.
El área infantil en cuestión ha estado rodeada de polémica desde su creación. El Grupo Popular criticó su ubicación por considerarla poco adecuada y que se permitiera su uso sin las medidas de seguridad adecuadas. Posteriormente se ha sabido que el equipo de gobierno había mentido en lo referente a su coste, pues el precio dado por el concejal Darío Dolz era cerca de 8.000 euros más caro.