Cuenca

La Plataforma Contra el Cementerio Nuclear anima a comprar productos agroalimentarios de Castilla-La Mancha

Redacción | Miércoles 02 de enero de 2013

Que la población se fije en los pueblos y evitar el despobalamiento, que sus habitantes se puedan ganar la vida de forma digna y que el campesino sienta el orgullo de serlo y tener esperanza en el futuro, es muy necesario para evitar la imposición de proyectos tan destructivos como el cementerio nuclear.

Los productos agroalimentario s de Castilla-La Mancha, son realmente interesantes para el consumidor medio, pues están garantizados por sellos oficiales de dos tipos: Denominaciones de Origen Protegida (D.O.P.) e Indicaciones Geográficas Protegidas (I.G.P.).


Además, cada vez hay más explotaciones con el sello de "Agricultura ecológica" (regulado por normativa europea) que suponen el máximo nivel de calidad de los productos agropecuarios y una oportunidad de negocio pues su consumo está subiendo de forma expectacular.

Por eso María Andrés, ganadera y portavoz de la Plataforma Contra el Cementerio Nuclear en Cuenca, ha declarado que "La comarca de Villar de Cañas es el granero de la provincia y su agricultura es de capital importancia. No solo por ser el modo de vida de miles de familias, sino también, unos recursos estratégicos,imprescindibles de conservar y aprovechar racionalmente. Sobre todo ahora, que la crisis es más profunda, todo lo que tenga que ver con la alimentación, cobra más importancia. Cada vez que vamos a comparar, debemos reflexionar si estamos contribuyendo o no al desarrollo de nuestra Región. Casi siempre hay alternativas de consumo de productos cercanos. De esta manera ayudamos a nuestro agricultores y contaminamos menos al precisar menos transporte. Ahora que el negocio del ladrillo ha tocado a su fin, el futuro del emplo y el desarrollo es de las economías verdes: las energías renovables, el turismo rural y la agroecología. Y en todos estos sectores la provincia de Cuenca es lider en España y tiene un enorme potencial".

"Pero no podemos permitir que en la comarca de Villar de Cañas  ocurra lo mismo que con la Denominación de Origen vitivinícola "Côteaux du Tricastin" en Francia, que ha tenido que cambiar su nombre ante el hundimiento de ventas por las fugas de la central nuclear de Tricastin.  Pasando en 2010 a llamarse "Grignan Adhemar”, ha finalizado Andrés.