El delegado de la Junta de Comunidades en Cuenca, Rogelio Pardo, ha preguntado al alcalde de esta localidad, Juan Ávila, por qué no pidió una reunión con el anterior Gobierno socialista cuando éste prometió un hospital nuevo para Cuenca sin presupuesto o “cuando sus compañeros se dedicaron a despilfarrar el dinero y a gastar sin control, dejando 158.795 facturas, como ha publicado la Sindicatura de Cuentas de C-LM, y poniendo en serio peligro los servicios públicos”.
“Sorprende que el señor Ávila diga que no va a permanecer impasible cuando ni se inmutó cuando sus compañeros socialistas permitieron situar los servicios públicos -que dice defender- al borde de la quiebra”, ha indicado el delegado de la Junta. A su juicio, “lo que estamos desmantelando es el despilfarro y el gasto socialista”.
Para el delegado de la Junta, lo que está haciendo el alcalde de Cuenca es sumarse a la estrategia política que se está impulsando desde su partido y desde otras formaciones y plataformas, que se basa en “alarmar a los ciudadanos, no querer hablar ni dialogar -porque a mí nadie me ha pedido una reunión- y hacer demagogia, olvidándose de que cada decisión que se adopta va encaminada a garantizar los servicios básicos como sanidad y educación”.
“Estamos tomando medidas para mantener los servicios sanitarios que ellos dejaron sin pagar. Intentamos pagar las nóminas de los sanitarios y las deudas heredadas porque, de no ser así, los proveedores dejarán de suministrar medicamentos”, ha añadido.
El delegado ha reiterado que los servicios que hoy tiene el Hospital Virgen de la Luz son los mismos que tenía hace un año, “a pesar de que algunos parecen estar empeñados en que se quiten”.
Pardo cree que el alcalde de Cuenca sólo busca el “oportunismo político y el protagonismo”, por lo que le ha reclamado que se dedique a gobernar el Ayuntamiento y a dejar de crear alarma y de hacer una demagogia que no conduce a nada”.