La presidenta de Castilla- La Mancha, María Dolores Cospedal, ha pedido hoy a los ciudadanos su apoyo para “mejorar la eficiencia y la calidad del sistema sanitario”, recalcando que “sin hablar de ninguna fórmula de copago”, porque “hemos entendido que antes de pedirle a los ciudadanos nuevos esfuerzos en forma de tasa o de impuesto, es necesario demostrar que somos capaces de ahorrar hasta el último céntimo y de hacer auténticos esfuerzos de austeridad con nuestros propios medios”, garantizando la sanidad pública.
En este sentido, ha anunciado la puesta en marcha de mecanismos de colaboración público-privada en la gestión de los hospitales de Almansa, Villarrobledo, Manzanares y Tomelloso, para salvaguardar y garantizar –porque hoy son inviables económicamente- la continuidad y la supervivencia de los mismos.
María Dolores Cospedal ha destacado que el Gobierno regional preservará siempre la gratuidad y la universalidad de la asistencia sanitaria, el carácter público de la prestación, la equidad en el acceso, la calidad en la atención y la satisfacción ciudadana. “Los ciudadanos no van a notar cuando entren a un centro sanitario absolutamente nada diferente”, ha explicado. De esta manera se ahorrarán 37,4 millones de euros anuales, además de recuperar la inversión de 170 millones de euros prevista para 2012.
No hace falta recortar prestaciones para ser eficientes
A juicio de Cospedal, no hace falta recortar prestaciones para ser eficientes, pero sí que hay que reformar “sin excusas” lo que no funciona adecuadamente
Así, se reducirá el número de directivos y mandos intermedios en las instituciones sanitarias, lo que producirá un ahorro de 26,6 millones de euros, y se acometerá el reemplazo generacional de los profesionales sanitarios, con el retiro de los que cumplan la edad de jubilación, lo que supondrá 45,2 millones de euros de ahorro.
Asimismo, en el año 2012 no se realizarán aumentos retributivos por el complemento de la carrera profesional a los trabajadores sanitarios y se reducirán temporalmente los complementos salariales vigentes en situaciones de incapacidad laboral transitoria, al tiempo que se llevará a cabo un seguimiento exhaustivo para luchar contra el absentismo laboral injustificado, lo que en opinión de Cospedal es “absolutamente desproporcionado en el ámbito sanitario”. Para hacer frente a la demanda asistencial, se ajustarán los descansos tras las guardias en sábados y días festivos. Con estas medidas se conseguirá un ahorro de 32,3 millones de euros.
Para evitar la contratación innecesaria de personal, ha continuado, se flexibilizará la apertura de camas y quirófanos, lo que producirá un ahorro de 72,1 millones de euros. Con respecto a la atención continuada, se realizará un ajuste de su precio por hora -de acuerdo con la media nacional- y se eliminarán pagos adicionales tras la quinta jornada de guardia.
“No podemos consentir que se paguen cantidades millonarias en actividades extraordinarias de tarde, mientras en algunos casos los rendimientos en jornada ordinaria no son los adecuados”, ha denunciado Cospedal.
La presidenta de Castilla- La Mancha ha anunciado también que se pondrá freno a la “demanda inapropiada” de servicios sociosanitarios, con un ahorro de 11,9 millones de euros; se pondrá en marcha el plan de eficiencia del transporte sanitario, eliminando duplicidades y gastos innecesarios, siempre que no se perjudique la calidad en la atención, con 4 millones de euros de ahorro; y el plan de mejora de la eficiencia en los servicios de diagnóstico y laboratorios de salud pública ahorrará 15,4 millones de euros.
Cospedal agradeció a los proveedores del servicio de salud de Castilla- La Mancha su apoyo en estos meses, en los que han mantenido los servicios -en ocasiones sin poder cobrarlos- y ha anunciado la puesta en marcha de “fórmulas de contratación más baratas y más eficientes, impulsando iniciativas como centrales de compras y el rediseño de las redes logísticas”, con lo que se ahorrará un total de 38,5 millones de euros.
Además, se pondrán en marcha herramientas “para mejorar la calidad y la eficiencia de la prescripción farmacéutica”, especialmente en los medicamentos de uso específico y de alto coste, lo que supondrá un ahorro de 51 millones de euros.
Igualmente, se recurrirá a fórmulas de colaboración con el sector privado para el desarrollo de nuevas infraestructuras en el ámbito sanitario y sociosanitario, de manera que la construcción de los centros hospitalarios dejados en previsión por el anterior Ejecutivo –Cuenca, la ampliación del de Guadalajara y de Toledo- tendrán este carácter. Todas estas medidas ahorrarán 109,4 millones de euros.
En el área de Asuntos Sociales, Cospedal ha asegurado que el Ejecutivo castellanomanchego tendrá que hacer sacrificios de forma temporal, aunque mantendrá su compromiso con los más desfavorecidos: “Queremos proteger a aquellos que más ayuda necesitan”, señaló Cospedal.
En este sentido, sólo recibirán ayudas las personas y familias con rentas más bajas, siempre y cuando no reciban otras ayudas públicas incompatibles, mientras que los centros de mayores y menores, personas con discapacidad o dependencia “sólo se financiarán las plazas ocupadas y no las reservas de plaza”.
“El compromiso del Gobierno con los más pobres siempre va a estar vigente. Pero hoy es imposible asumir obligaciones que supongan la necesidad de incrementar el endeudamiento de nuestra región vinculadas a políticas cuantitativas de gasto en materia de cooperación internacional. No nos podemos permitir créditos y pagar intereses por importe de 40 millones de euros para hacer cooperación internacional”, ha concluido Cospedal.