Cuenca

Para el Colectivo Republicano los ciudadanos de Cuenca deben seguir resistiendo frente al electoralismo y el clientelismo interesado en el ATC

Redacción | Viernes 29 de abril de 2011

La Asociación republicana conquense se ha sumado a los llamamientos que desde la Plataforma contra el cementerio nuclear en Cuenca se están haciendo para que los ciudadanos participan este sábado en la IIª Marcha a pie a Villar de Cañas para seguir demostrando la falta de consenso social en relación a la posible ubicación del Almacén Temporal Centralizado (ATC) en este municipio de la provincia de Cuenca.

Desde el colectivo republicano se ha insistido en lo importante de la participación ciudadana para evitar que el clientelismo de unos y el electoralismo de otros se imponga en este asunto y sea el poder democrático de la sociedad disconforme el que marque la pauta antes de que se tome una decisión al respecto.





Por ello han remarcado desde el colectivo republicano que de ubicarse el ATC en Villar de Cañas “se estaría poniendo en juego de manera irreversible la  salud y la naturaleza, para generaciones y generaciones futuras, para los vecinos del pueblo pero también de los habitantes de la comarca y de la provincia. En una decisión que no tuvo ninguna consideración de solidaridad y sin  que hubiera un debate público democrático abierto y participativo”

Desde Ciudadanos por la República han recordado por último su posición sobre la energía nuclear y los residuos que produce afirmando que “que la única forma de tratar con estos residuos es no producirlos” afirmó el presidente del colectivo Miguel Angel Doménech, quien también incidió en que “se trata de miles de toneladas de las sustancias más tóxicas que existen, y que lo seguirán siendo durante centenares de miles de años. Si pensamos que nuestra civilización sólo tiene unos diez mil años, es sencillamente imposible garantizar que estos residuos estén aislados de la biosfera durante este enorme periodo de tiempo, a salvo de terremotos u otras catástrofes naturales como se ha demostrado desgraciadamente en Japón”.