La procesión comenzó pasadas las siete de la tarde, tras la celebración de la eucaristía en la parroquia del barrio. Vecinos de todas las edades se unieron a la marcha, reflejando la devoción que genera la figura de San Julián.
El concejal Adrián Martínez Vicente, acompañado por otros miembros de la Corporación Municipal, participó en la misa en honor a San Julián. Después, todos se unieron al desfile procesional, que recorrió las principales calles del barrio, celebrando la figura del patrón de Cuenca.
Como parte de la tradición, al finalizar la procesión, se llevó a cabo el reparto de los típicos panecillos del Santo.